La fiesta de los Oscar se prepara como todos los años y con la confianza de sus organizadores de
que alcanzarán un acuerdo con los guionistas, que cumplen una huelga desde el 5 de noviembre y que
ya derribó la ceremonia de los Globos de Oro. Pero los guionistas no piensan ceder en sus reclamos
de mayor reconocimiento económico por su trabajo, con lo cual la fiesta más glamorosa de la
industria aun está en suspenso.
“Seguimos con nuestro plan”, declaró Bruce Davis, director
ejecutivo de la Academia de las Ciencias y las Artes Cinematográficas, quien en nombre de la
organización expresó su optimismo frente a un acuerdo con los guionistas que permita realizar la
ceremonia el próximo 24 de febrero.
Por su parte, Gil Cates, productor del programa de los Oscar, dijo que
la Academia lo llevará a cabo el 24 de febrero, con o sin los guionistas. “Vamos a
hacerlo”, dijo Cates. “No puedo dar detalles sobre la forma en que lo haremos, porque
no quiero que nadie interfiera con el proceso de forma que pudiera comprometer su éxito”.
En el otro extremo de la disputa, el gremio de los guionistas ya anunció
que no permitirá a sus miembros escribir los guiones para el espectáculo de los Oscar, previsto
para el 24 de febrero, pero aún no han confirmado explícitamente si realizarán piquetes a las
puertas del Teatro Kodak, empañando el evento que es transmitido por la cadena ABC, una de las
corporaciones en disputa con los guionistas.
Para Tom O’Neill, experto en premios de Hollywood, si la WGA
decide fijar sus piquetes, las consecuencias negativas caería nuevamente en el campo del sindicato
de actores. “Sería hipócrita de su parte (los actores) cruzar los piquetes de los Oscar
cuando decidieron no hacerlo para los Globos de Oro”, declaró el columnista del diario Los
Angeles Times.