"Nomadland”, filme de la realizadora chino-estadounidense Chloé Zhao protagonizado por Frances McDormand, ganó el León de Oro de la 77ma. edición del Festival Internacional de Venecia, en tanto que el León de Plata Gran Premio del Jurado quedó en manos de “Nuevo Orden”, del mexicano Michel Franco.
Ninguno de los dos premios representó una gran sorpresa, tal los reportes de los medios especializados acreditados en la Mostra que señalaban a ambas cintas a la cabeza de las favoritas de una edición marcada por la ausencia de los grandes “tanques” y las figuras de Hollywood por la pandemia.
De acuerdo con el comunicado publicado en el sitio web del Festival, el jurado presidido este año por la actriz australiana Cate Blanchett eligió a la cinta de Zhao como la mejor de la Selección Oficial. La particularidad de este encuentro fue que entre las dieciocho películas que se disputaron el premio mayor, ocho fueron dirigidas por mujeres.
Ni la directora ni su principal protagonista pudieron estar presentes para agradecer el galardón, aunque lo hicieron por videoconferencia y a las puertas de la furgoneta que condujeron durante el rodaje. En cambio, el premio fue recibido por el director italiano de marketing de Disney, Davide Romani.
“Nomadland” narra la historia de una mujer sexagenaria que pierde su trabajo y a su marido en la época de la Gran Depresión, y que decide meter sus pocas pertenencias en una camioneta y echarse a la carretera por el oeste norteamericano.
La modalidad de vivir en el camino, al margen de un mundo que está cambiando y en busca de soledad, está aparentemente tan extendida en Estados Unidos, que en el elenco del filme actúan varios “nómadas” reales.
Por su parte, el filme de Franco, ganador del León de Plata, es una distopía ambientada en México en la que los pobres se rebelan contra las minorías acomodadas, buscando invertir el orden establecido con la venganza como bandera. La película, que también obtuvo el Leoncino de Oro que otorga el Jurado Joven, es una metáfora despiadada de ese país y del mundo moderno, azotado por las diferencias sociales, el racismo, las desigualdades.
En su elenco se destacan Patricia Bernal y Darío Yazbek Bernal (este último de gran repercusión en los últimos años por su papel en la serie “La casa de las flores”), respectivamente la madre y el hermano de Gael García Bernal; y Diego Boneta, también famoso por encarnar a Luis Miguel en su exitosa serie biográfica.
El León de Plata a Mejor Director de la Mostra recayó en el japonés Kiyoshi Kurosawa (“Wife of a Spy”), el Premio Especial del Jurado fue para “Dear Comrades!”, del ruso Andrei Konchalovsky; y el Mejor guión para el filme indio “The Disciple”, de Chaitanya Tamhane.
En el rubro actoral, el palmarés se repartió de la siguiente manera: la copa Volpi a Mejor Actriz para Vanessa Kirby (por el filme “Pieces of a Woman”), a Mejor Actor para Pierfrancesco Favino (“Padrenostro”) y el premio Marcelo Mastroianni al Mejor Actor o Actriz Joven para Rouhollah Zamani (en la iraní “Sun Children”).
Venecia, la primera gran muestra internacional de cine de la era Covid-19, finalizó entre las aclamaciones de críticos, cineastas y actores a los organizadores por atreverse a realizar la muestra en medio de la pandemia y demostrar cómo se puede regresar al cine con seguridad.
El codiciado León de Oro y los demás premios se entregaron ante una audiencia enmascarada en la que los astros de Hollywood brillaron por su ausencia debido a las restricciones impuestas por el coronavirus.
La realización del festival de 10 días estuvo en duda, después de la cancelación del Festival de Cannes y la decisión de Toronto y Nueva York de realizar sus muestras online.
Pero cuando Italia logró domar el virus con 10 semanas de cuarentena estricta, Venecia decidió seguir adelante, aunque con protocolos de seguridad que hubieran sido insólitos para un festival que siempre se ha enorgullecido de su espectacularidad y el glamour de los asistentes.
El uso del cubrebocas fue obligatorio en interiores y exteriores, incluso durante las proyecciones. Las entradas se debieron solicitar por adelantado y las salas redujeron su aforo a menos de la mitad. El público no pudo acceder a la alfombra roja, y los paparazzi, que normalmente persiguen a las estrellas en botes alquilados a su arribo al Lido, recibieron puestos socialmente distanciados en tierra.
Dado el largo período de incubación del Covid-19, no se puede determinar aún si las medidas resultaron eficaces, pero en lo inmediato no hubo informes de contagios.
“Claro que al principio estábamos un poco preocupados’’, dijo el director del festival, Alberto Barbera. “Sabíamos que teníamos un plan muy estricto de medidas de seguridad que nos daba bastante certeza, pero nunca se sabe’’.
La directora hongkonesa Ann Hui, que recibió un León de Oro a la Trayectoria, casi no pudo viajar debido a las restricciones en la frontera. Arribó finalmente para recibir su premio y asistir al estreno mundial fuera de competencia de su filme ``Love After Love’’.
Si bien la Mostra incluyó películas de México, Irán, India, Australia y otros países, fue principalmente europea. Sin embargo, la diversidad de los países representados fue una satisfacción personal para Barbera.
“ ste es mi premio’’, dijo el director de la cita veneciana. “Tuvimos la suerte de recibir películas de todo el mundo, aparte de la ausencia de los grandes estudios de Hollywood. La mayoría de los países están representados en Venecia y la calidad de la muestra es realmente muy alta’’, indicó.