Daniel Querol, de larga trayectoria en la escena teatral rosarina, integrante del elenco de "Evita, un puente de amor" y responsable de la dirección actoral y escénica de la obra, fue categórico a la hora de definir esta apuesta. "Estas dos funciones son el lanzamiento de esta nueva «Evita», así lo concebimos y se trabajó mucho para generar este producto artístico".
Querol adelantó que para la nueva apuesta se respetó la versión original, con modificaciones en aspectos puntuales, tanto en lo musical como en lo visual. "Lo que se hizo fue generar un lenguaje y un timbre distinto, y por supuesto crecer porque todos no somos iguales a hace 30 años. Lo que nos pasa a nosotros en la vida como actores o como músicos lo tratamos de mostrar arriba del escenario".
Desde el punto de vista de la puesta en escena Querol destacó el trabajo de Viviana Artigas. "Incorporamos imágenes en pantalla gigante, pero a diferencia de otras puestas sobre un personaje tan importante como Evita, donde generalmente se usan imágenes de archivo que uno ya las vio en todos lados, acá Viviana Artigas, que es una artista plástica, además de actriz y directora de cine, se encargó especialmente de trabajar con imágenes con las que hizo montajes totalmente originales".
Querol aseguró que no hay una razón especial para volver a a poner en escena "Evita, un puente de amor" en este momento. "No es coincidente con nada. En realidad es coincidente con nuestras energías, esto nunca se dejó de hacer en nuestras cabezas. Lo que pasa es que esperábamos el momento. Desde el estreno hasta aquí, fueron mutando muchísimos compañeros, tanto músicos como intérpretes. Son 30 años y a la gente le pasan cosas. Nosotros creemos, sin ninguna pretensión ni soberbia, que esta quizás sea la versión definitiva. Era la «Evita» que veníamos queriendo hacer, con este lenguaje, con este formato, con esta versatilidad, esta sugerencia, y si es coincidente con determinada situación histórica, eso es ineludible", concluyó.