Los reconocidos Ralph Fiennes y Anya Taylor-Joy protagonizan “El menú”, el film dirigido por Mark Mylod que, tras su paso por las salas de cine, llega hoy a la plataforma de Star+. La película, que está centrada en la particular e inesperada experiencia gastronómica de un grupo de comensales del jet set en un exclusivo restaurante, es una atrapante combinación de comedia negra y suspenso al servicio de la manipulación de las expectativas del público.
La incomodidad y las sorpresas crudas —bien crudas— están a la orden del día en el cuarto largometraje del cineasta británico, mejor conocido por su trabajo en las multipremiadas series “Succession” y “Game of Thrones”, que en esta ocasión se lanza de lleno al terreno de la sátira y el thriller para recordarle al público que lo prestigioso no siempre tiene valor por sí mismo. En ese sentido, el comentario que esgrime “El menú” se traduce tanto en la cuidada estética a cargo del director de fotografía Peter Deming (“Twin Peaks”), como en una trama que, si bien pide su tiempo, sabe sostener la tensión y apuntalar un clima desesperante y lleno de contrastes.
Todo aparenta ser muy claro desde el vamos: Tyler (Nicholas Hoult), un arrogante y obsesivo sibarita, y su cita, Margot (Taylor-Joy), esperan en un muelle a otras diez personas de clase muy acomodada con las que irán en bote hasta la recluida isla de la costa del Pacífico en la que se encuentra Hawthorn, un restaurante de primera categoría manejado por el mundialmente famoso chef Julian Slowik, interpretado por un Ralph Fiennes que, como siempre, brilla en papeles antipáticos con su fría aura inglesa.
Una snob crítica gastronómica y su editor, tres jóvenes ejecutivos del mundo de las startups tecnológicas, un actor en decadencia y su asistente y un matrimonio habitué del lugar integran el grupo de clientes que se adentrará en el ambiente minimalista y moderno del predio. Cínico y estricto, Slowik los espera en el salón junto a su obediente tropa de cocineros mientras prepara el fastuoso menú molecular que planificó para la ocasión, pensado y tratado como un conjunto de piezas de arte conceptual, en un guiño burlón a la exquisita pomposidad desplegada por la tira documental “Chef’s Table” y otros contenidos que explotan lo que hoy se da por llamar “food porn”.
“El chef es un narrador, y el juego es intentar adivinar cuál será el tema general de toda la comida”, le explica Tyler a una incrédula Margot, que como un sapo de otro pozo pregunta dónde está el pan para las pequeñísimas muestras de salsas que les sirven. Ella piensa en la comida no como en una experiencia sino como en un medio para alimentarse, y desafía los cálculos de la velada.
Pero lo que comienza como una reunión exclusiva de individuos con exigentes paladares se convierte de manera progresiva en una pesadilla difícil de creer para las y los comensales de Hawthorn, con un menú que revelará paso a paso oscuros secretos y hasta profundas inseguridades bajo la mirada satisfecha de su anfitrión, que también a ese ritmo dará a conocer las verdaderas y estremecedoras motivaciones detrás de la elección de esa lista.
Con un giro que escala rápidamente, la película rebosa en acidez y violencia, concentrada en momentos de aquellos que inmediatamente hacen dudar si “está bien” reírse de lo que aparece en pantalla. Todo parte de un mecanismo narrativo de buen balance elaborado por Seth Reiss (“Late Night with Seth Meyers”) y Will Tracy (“Succession”), los destacados guionistas detrás del film.
El Menú (2022) Tráiler Oficial Subtitulado