El Festival de Cannes no renuncia a la presencia de celebridades, aunque este año la política, los problemas sociales y nuevos rostros de la industria estarán más que presentes en la 72ª edición de la muestra más glamorosa del cine que se desarrollará a partir de mañana y hasta el 25 de mayo. Argentina estará presente en secciones paralelas con "Que sea ley", un documental de Juan Solanas, y "Por el dinero", de Alejo Moguillansky.
Esta edición, que incluye filmes en los que se refleja la crisis migratoria, el islamismo, la pobreza y los desencuentros políticos, contará también con muchas caras conocidas y sus respectivas películas en la competencia por la Palma de Oro. Allí estarán Pedro Almodóvar con "Dolor y gloria", un filme sobre la vida de un director de cine en su ocaso al que el cineasta calificó como su obra más "íntima".
También será de la partida Quentin Tarantino con "Erase un vez en Hollywood". Tarantino competirá por un premio que ya conquistó hace 25 años con "Pulp Fiction". Protagonizada por Margot Robbie, James Marsden, Leonardo DiCaprio, Brad Pitt, Dakota Fanning, Al Pacino y Kurt Russell, el filme se sitúa en el Hollywood de 1969, con los terroríficos asesinatos de Charles Manson como telón de fondo
Otra celebridad del cine en competencia será Jim Jarmusch con su comedia de zombies "The Dead Don't Die" que inaugurará el certamen. Es la novena vez que Jarmush compite en Cannes, esta vez con un trabajo protagonizado por Bill Murray y Adam Driver y del que también participan Tilda Swinton, Chloe Sevigny, Steve Buscemi y Danny Glover.
Este festival también es el lugar desde el cual un rostro nuevo puede proyectarse a la escena mundial. Se trata de Mati Diop, cineasta francesa nacida en Francia de padres senegaleses y la primera mujer negra que compite por el premio máximo de Cannes con "Atlantique", rodada en Dakar. El filme detalla el relato de la inmigración, desde la miseria previa, el maltrato, la decisión de irse, la angustia del desarraigo y la aventura de lanzarse al mar.
Diop, que realizó una serie de cortometrajes altamente elogiados y protagonizó la película "35 Shots of Rum" de Claire Denis, exhibe por primera vez un largometraje en Cannes. "He pasado por toda una gama de emociones desde el anuncio hasta ahora", dijo Diop. "Es muy estimulante para mí ser parte de esta edición que se destaca por sus innovaciones. Es una selección en la que hay más mujeres, más óperas primas, en la que Africa está representada".
Otros platos fuertes de esta competencia que invita a la reflexión sobre cuestiones globales serán "Young Ahmed", de los hermanos Jean-Pierre y Luc Dardenne; "A hidden life", de Terrence Malick; "Il traditore", de Marco Bellocchio; "It must be heaven", de Elia Suleiman y "Sorry we missed you", de Ken Loach.
El británico Ken Loach, ganador de la Palma de Oro en 2006 con "El viento que acaricia el prado", relata en "Sorry we missed you" la historia de Ricky y de su familia, que viven para luchar contra las deudas tras el crack económico de 2008.
Terrence Malick con "A hidden life" se sumerge en un drama de la Segunda Guerra Mundial a través de una historia real: la de Franz Jagerstatter, un campesino austriaco y ferviente católico que en 1938, con la llegada del nazismo, fue el único de su país que votó contra la Anschluss, es decir, la anexión de Austria a la Alemania de Hitler. Cuando se desató el conflicto, en 1943, se negó a enrolarse en la armada del Eje y fue ejecutado.
De extrema actualidad es el film "Young Ahmed", de los hermanos Dardenne, en la que un adolescente belga planea asesinar a su profesora tras haber adherido a una interpretación extremista de algunos tramos del Corán, el libro sagrado del Islam.
El espinoso conflicto en Medio Oriente estará presente con "It must be heaven", de Elia Suleiman. El protagonista es un hombre que huye de Palestina en busca de un nuevo hogar. Se trata de un relato irónico que explora la identidad, la nacionalidad y la pertenencia.
"Il traditore", de Marco Bellocchio, relata la historia del arrepentido de la mafia Tommaso Buscetta. Sus declaraciones permitieron descubrir la estructura mafiosa de la Cosa Nostra, desenmascarar a sus capos, encarcelarlos y revelar sus estrechos vínculos con la política.