"El secreto de «El elegido» es la novela", dijo ayer Pablo Echarri, en pleno suelo rosarino, con una sonrisa típica de Andrés Bilbao, su personaje protagónico en la exitosa tira de Telefé, que se emite de lunes a jueves, a las 23, por la pantala de Canal 5.
Echarri fue la cabeza parlante de la troupe de la telenovela que arribó anoche, pasadas las 20.30, al lujoso hall del Hotel Pullman del City Center.
Junto a él estaban Léticia Brédice (la psicótica Verónica San Martín), Luciano Cáceres (el perverso David), Martín Seefeld (el psicólogo Santiago), Ludovico Di Santo (el polémico doctor Octavio), María Carámbula (Lucía, la mujer engañada),María Dupláa (Jimena Estévez), Calu Rivero (la conflictiva Erica) y Paloma Contreras (Mariela, la hermana de Andrés).
Los ausentes con aviso fueron Paola Krum (Mariana, la protagonista) y Lito Cruz (el temido doctor Oscar Nevares Sosa).
Pero, claro, la euforia que rodeaba las instalaciones del casino rosarino era el rebote exacto de lo que significa "El elegido", una pasión que supera ampliamente la pantalla chica y que va mucho más allá de una medición de rating, que a veces sufre los embates de "ShowMatch" en la vereda de enfrente.
No hay dudas, "El elegido" es una tira que hará historia en la televisión argentina, por sus interpretaciones, por el contenido, por su trama intensa y por su audacia, e incluso por su creatividad en la puesta visual.
"Creo que es una historia contada de una forma diferente. El género de la telenovela generalmente da por hecho un montón de situaciones, que en esta historia se decidió que el público las vaya descubriendo de a poco, que la gente se vaya enamorando y también odiando a los personajes", dijo Echarri, mientras pedía un vaso de agua y soportaba los flashes de las cámaras con su mejor buena predisposición.
El fanatismo del público por esta novela fue otro de los temas abordados por el actor que en su momento también se lució con "Montecristo". "La idea es presentar un comienzo aparentemente apacible para un final verdaderamente terrible, y creo que eso generó una suerte de adicción".
Luego de contar con simpatía la demora de los actores y agentes de prensa de Telefé por un hecho mecánico insólito (“en vez de nafta le pusieron gas oil al auto, pero ya pasó”), Echarri agregó que “el nivel de conflictos en la tira genera por momentos un nivel de taquicardia en el televidente. Y ese dejo de ansiedad tiene que ver con el agrado de ver un hecho de ficción”.
Para el actor, “El elegido”, tira en la que debutó en la producción de la mano de Martín Seefeld, está provocando algo que fue “deliberado”. “Sabíamos que podíamos generar esto en el público, esta es la historia que a mí me gusta contar. La historia de amor es el eje, pero hay un conflicto policial y político que me asegura que los hombres también se sienten frente al televisor”, agregó. Y no negó que por ser un año electoral (su personaje es candidato a presidente de la Nación) se le dio un vínculo para ese costado político “tratando de aprovechar la energía reinante”.
Otra de las figuras más solicitadas de la noche fue, sin duda alguna, Luciano Cáceres, el muy buen actor que interpreta a David Nevares Sosa, el abogado perverso, que es bisexual y amante de los excesos, y que está en pleno proceso judicial en la tira por una causa de agresión y violación de Mariana Estévez, el personaje que interpreta Paola Krum.
“Ya me dicen David por la calle e incluso me llaman también por mi nombre y apellido. Es que este personaje es realmente muy fuerte para la historia y para mí también”, destacó Cáceres.
“Este es un malo bastante particular, viene de una historia pesada, se crió en el desorden, y en una vida en la que todo tiene precio”, dijo el actor, para quien su rol “es soñado” y, por si fuera poco, adelantó que “el nivel de perversidad de este personaje no va a parar”.
Con una lógica chochera, Martín Seefeld, actor y productor, dijo que la tira no se extenderá más allá de fin de año: “Las historias tienen que empezar y terminar, hay que tener respeto por la gente”.
Y agregó: “Los televidentes se van a sorprender mucho más todavía, hay puntos de giro de la historia que nos sorprendió y nos voló la cabeza”. “El elegido” va por más, y parece que lo mejor está por venir.
“No tengo idea hasta dónde llegará Verónica”
Verónica San Martín ya dejó a un costado a Leticia Brédice. Al menos, eso se notaba anoche en el hall del hotel, entre copas de vino y exquisiteces del catering. Luego de pedir casi con desesperación una copa de agua fresca, explicó por qué su personaje copó tanto a la audiencia, generando hasta una suerte de furor en la web, con videos y club de fans con su nombre. “Lo estudié y estoy agradecida por ese rol. Ese personaje habla de cosas que a nadie le gusta hablar, y eso es lo interesante, lo estudié mucho”, destacó, y aseguró que investigó modos de comportamiento de la aristocracia y la burguesía argentina, para poder darle el toque justo. “No tengo idea hasta dónde va a llegar ese personaje”, dijo mientras se corría el cabello de sus ojos, y relojeaba el ambiente con una mirada que mixturaba picardía y sorpresa. Para la actriz, quien mostró su talento interpretativo en la pantalla chica en el 2004 con el unitario “Locas de amor”, que triunfe “El elegido” es “cuestión de bingo”, quizá una paradoja inconsciente por el entorno del casino. “Es algo muy raro lo que pasa con las cosas que funcionan y con lo que a la gente le gusta”, concluyó la intérprete.