La actriz Soledad Silveyra, que hoy estrena en el porteño Paseo La Plaza “Espejos circulares”, la nueva apuesta de Javier Daulte, afirmó que la obra, directamente importada desde el off de Broadway, es “la síntesis perfecta de lo que es el teatro”.
La actriz Soledad Silveyra, que hoy estrena en el porteño Paseo La Plaza “Espejos circulares”, la nueva apuesta de Javier Daulte, afirmó que la obra, directamente importada desde el off de Broadway, es “la síntesis perfecta de lo que es el teatro”.
“Todo transcurre en un taller de actuación en un pueblo donde, a partir de ejercicios muy tradicionales en este tipo de cursos, se cuenta la historia de cinco personajes aparentemente muy pequeños pero con grandes historias”, comentó la actriz que protagoniza la obra junto a Andrea Pietra, Vicki Almeida, Jorge Suárez y Boy Olmi.
“Espejos Circulares”, de la autora Annie Baker, muestra un taller de teatro para aficionados donde, sin buscarlo, cinco almas perdidas comienzan a conocer más de sí mismos y de los otros por medio de juegos.
Al respecto, Andrea Pietra, que encarna a Teresa, una actriz de 35 años, explica que “en el marco de los típicos juegos teatrales que se hacen en las clases, terminan involucrándose mucho más con sus emociones, porque el ejercicio los va llevando hasta permitirles descubrir quiénes son y qué le pasó a cada uno en la vida”.
“Mi personaje es de esas mujeres de las que todos se enamoran pero de una gran soledad, que viene de una relación de mucho maltrato y que se va a vivir a este pueblo donde decide iniciarse en el taller para no estar tan sola”, detalla.
Por su parte, Solita —quien actuó en “Vidas robadas” y “Amor en custodia”— personifica a la profesora de la clase, una mujer con la que, imprevistamente, terminó identificándose desde lo emocional. “Nunca me pasó sentir tanto un personaje, estoy en carne viva y esto tiene que ver con el director, con la manera que tiene de involucrarnoso”, dice.
“Y lo paradójico —continúa quien fuera protagonista del legendario culebrón “Rolando Rivas, taxista”— es que al principio yo descreía de los métodos de estos directores modernos, pero ahora estoy profundamente agradecida porque la obra me puso en contacto absoluto con mis emociones”.
“Yo venía de laburar en «Agosto» con Claudio Toclachir y cuando vi que estaba Daulte en el medio supe que tenía un respaldo, porque es un director donde todos los actores se lucen, es un director de actores”, asegura Pietra. “Cuando leí la obra, me di cuenta que estaba bueno para matizar porque en la obra anterior venía de un personaje con bastante costo dramático”, agrega.
Por último, en relación a la puesta, ambas destacan la dinámica ágil del espectáculo que consta de treinta escenas cortas unidas por apagones de luz.
“Para los actores es mucho desgaste por el movimiento en la oscuridad y pasar de un estado de concentración a otro en cuatro segundos, pero para los espectadores es más llevadero y eso es genial”, confiesa Pietra.
Atletas
“Estamos haciendo atletismo, porque llegamos con emociones que cortamos y volvemos a empezar en la escena siguiente, es muy difícil y al mismo tiempo es maravillosa porque una vez que conseguís que esa dinámica se produzca, logras que se consume la historia que queremos contar”, dice Solita.