"Creo que el rock nacional está en decadencia hace años, e incluyo a Guasones", dice, sin dudarlo, nada menos que Facundo Soto, compositor y líder de Guasones. Lejos de una pose y cada vez más cerca de contar y cantar lo que le pasa por la cabeza y el corazón, Soto dialogó con Escenario antes del show que la banda platense presentará hoy, a las 21.30 (puntual) en Willie Dixon (Suipacha y Güemes).
El motivo, o la agradable excusa de este show, es mostrar los temas de "Parque de depresiones", el nuevo disco del grupo que sabe mixturar el rock de guitarras ardientes con las baladas más intimistas. Soto, a horas de llegar a Rosario, contó cara a cara cómo es el ambiguo encanto de este parque musical.
-Fue un momento de la banda. Hicimos un click después de grabar y nos sentimos cansados por mucha ruta, mucho todo (sic), fue un momento bastante duro, no en la relación entre los músicos, pero sabía que se terminaba este disco y empezaba algo nuevo. Tiene que ver con la creatividad nuestra y el tipo de canciones que nos sale.
-¿Las canciones son una especie de espejo de la banda?
-Sí, a Guasones lo que más fácil le sale son las canciones. Si bien vivimos escuchando blues y rock, y tocamos rock todo el tiempo, a la hora de componer lo que menos nos cuesta son las baladas, a nosotros nos cuesta tocar rocanroles. Me sale mejor una canción que un rocanrol y es más fácil hacer letras que salgan de adentro.
-A casi 20 años de ruta, ¿en qué lugar está Guasones?
-No sé si nos insertamos tanto en el circuito. Al estar en La Plata, si bien es cerca de Capital también está lejos. Sé que es una banda que suena, nosotros nos prestamos a hacer videos, pero no somos una banda de dar muchas notas, no es por estrategia, sino porque nos cansa hacerlas. Creo que estamos afuera del circuito de bandas, tampoco tenemos tantos colegas amigos ni somos de ir a eventos.
-La Plata tiene un sello a través de Los Redondos y Virus. ¿Es un peso venir de un lugar con tanta historia rockera?
-La Plata es Los Redondos, es como decir Argentina y Maradona. Pero nunca fue un peso, para nada, escuchamos mucho Los Redondos desde que somos chicos, no sé si se refleja en la música, para mí no. Escuché también toda mi vida a Virus, que también son de La Plata, pero tampoco son influencia en lo que hacemos. De La Plata también son Estelares y estamos nosotros, que pasamos de largo.
-¿Qué tiene que suceder para que una banda quede y no pase de largo?
-Nosotros tuvimos una o dos canciones que quedaron, Estelares tiene muchas, no paran de sonar y se les va de las manos. Pero Virus iba más allá de la música, es un ideal. Mirá el Indio (Solari) y la cantidad de gente que mete en los recitales, no va de la mano la música y la lírica del Indio con el público que tiene. Esa música es lo más moderno y meticuloso que escuché, no es rocanrol, no creo que la gente sepa todas las canciones del lndio pero lo van a ver igual. Es una mística, como fue Virus.
-¿Cómo ves el rock nacional en estos tiempos?
-Creo que el rock nacional está en decadencia hace años e incluyo a Guasones. No vi salir bandas como Virus, Redondos, Ratones, Soda, o solistas como Calamaro, Spinetta, Charly, Fito, no vi más nada. Aparecieron solistas, bandas que llenan estadios, nosotros que llenamos el Luna Park y ahora quizá llenemos otro, pero musicalmente se cortó.
-¿Cuándo fue la caída?
-En los 90, fue cuando se empezó a manejar la estrategia de no aparecer, como hacían los Redondos, lo hicieron todas las bandas de rock, hacían tres Cemento hasta llegar a un estadio y se olvidaron de la creatividad, e incluyo a Guasones en todo esto. No está en un buen momento el rock nacional. Los mexicanos y los chilenos nos matan, y tuvimos las mejores bandas del rock en América, lejos, hicimos escuela y ahora no sé.
-¿Qué es el rock para vos?
-El rock es mi vida, no la música, el rock. Escucho de todo, incluso música clásica o reggae, pero lo que me hace vivir es el rock.
Entre riffs y baladas
“Qué difícil es bajarse de este tren/donde todo vale nada y nada es ley” canta Facundo Soto en “Heaven or Hell”, primer corte de “Parque de depresiones”, con un riff demoledor. La adrenalina del artista de rock y los vaivenes del amor sobrevuelan las letras de este disco, en el que convive un homenaje a Riff (“El forastero”) con una confesión hacia el doloroso amor a ciertos excesos (“No soy yo”). En el costado country de “Perdón”, la canción tipo Calamaro “Me estás tratando mal”, en “Camellos” y la desolada “Esperándote” se encuentra la mitad del ADN Guasones que sus fans adoran, que es el buen gusto por las baladas. Por eso no extraña que uno de los proyectos sea grabar un disco totalmente acústico (ver aparte). La voz áspera de Facundo Soto le da personalidad tanto a los temas rockeros como alos que invitan a la nostalgia. “Somos un poco depresivos”, dijo Soto en la entrevista, aunque aludió que el título del disco también surgió en forma azarosa cuando, de regreso de un show, conocieron un “deprimente” parque de diversiones.
Luna. “Vamos a presentar el disco en Rosario antes que en el Luna Park”, dijo Facundo Soto, quien destacó que “en el Dixon son más calientes los shows”. El 19 de agosto presentará “Parque de depresiones”, donde piensan agotar las 7.500 localidades, como en 2009, que debutaron y quedó grabado.
Campo. Facundo Soto le escapa a las notas de prensa, por eso él mismo toma como un caso excepcional la entrevista con este diario: “Vivo en el medio del campo, en la loma del culo, por Brandsen, cerca de La Plata, y no llego más. No tenemos ganas de dar notas, pero no es una pose ni nada, somos así”.
Acústico. “En un año y medio tenemos que sacar un disco de dies canciones acústicas, sería fatal, me encantaría y lo vamos a hacer”, destacó Soto, quien elogió la total libertad “para laburar” que le da la compañía discográfica Pop Art. “Estamos con ellos porque podemos hacer lo que queremos”, indicó.