Carmen Barbieri viene con una racha adversa desde hace mucho tiempo. Entre las enfermedades y accidentes que padecieron entre ella y su hijo Federico Bal pueden sintetizar una sucesión de malos momentos, los que parecen no concluir. Es que la conductora del programa Mañanísima (señal Ciudad Magazine) la semana pasada fue operada de una mano, y a las 48 horas tuvo un accidente doméstico que le provocó una fractura de peroné. Por lo que este martes cuando reapareció al frente del ciclo televisivo, lo hizo movilizándose con un bastón, y la actriz fiel a su humor ácido dijo con respecto al palo de apoyo: "Miren el bastón, es de Santiago Bal, es lo único que me dejó de herencia. Y también un andador, pero no iba a venir con ese porque doy pena ya".
Más allá de la ocurrencia de Carmen Barbieri, lo cierto es que su confesión fue lineal, ya que ella debió sortear serios problemas económicos debido a una mala administración que hizo, según la actriz, la familia de Bal.
En cuanto a la necesidad de movilizarse con la ayuda del sostén, la conductora contó: "Estoy con un bastón porque pierdo equilibrio".
Y en cuanto a la particularidad del bastón, que tenía colgado un llavero, Barbieri explicó divertida: "Santiago lo tenía diseñado así para no olvidarse las llaves, las colgaba en el bastón".
La capo cómica contó los dos problemas de salud más reciente, y en cuanto a la intervención quirúrgica de una mano sostuvo que padece de sinovitis, que es la inflamación del tejido conjuntivo que recubre las articulaciones, por lo que procedieron a una pequeña operación. Pero a los dos días sufrió un accidente doméstico con una fractura como consecuencia. "Me había resbalado con el pis de mi perro, que hace donde no tiene que hacer. Caí boca arriba, me di un golpe en la cabeza pero creo que volví a la normalidad. Me golpeé todo pero donde me rompí fue en el peroné", describió.
Estefi Berardi, quien la había reemplazado a Barbieri en la conducción de Mañanísima, ya había adelantado que "Carmen estaba en la cocina, con su perro, un caniche que se llama Rey. Parece que en un momento la mascota no aguantó más, hizo pis, justo Barbieri pasó por ahí, pisó el charquito, se patinó y se cayó. El fuerte dolor en el momento le marcó que algo no andaba bien. La revisaron, le hicieron los estudios de rigor y se confirmó la mala noticia".
Todo este incidente dejó como conclusión, además de la fractura, que Santiago Bal le dejó a Carmen Barbieri una herencia de poca relevancia económica: un bastón y un andador.