Navidad es sinónimo de reuniones familiares o con seres queridos. El problema es para aquellas personas que se encuentran solas. Para ellos, la Navidad es igual a sentir más pesada su soledad y tristeza. Esto es lo que ocurrió a un abuelo italiano que en medio de tanta desolación decidió llamar a la policía.
Fiorenzo tiene 94 años y vive en la ciudad de Bolonia, Italia. El 25 de diciembre el hombre se sintió solo, triste y quería compartir el brindis con alguien. Ahí tuvo una idea y llamó a la policía.
"Estoy solo en casa. No me falta nada, solo necesito una persona con quien intercambiar el brindis navideño. Si tienen un carabinero disponible, ¿podría venir por 10 minutos porque estoy solo?", describió el hombre a la policía italiana.
Desde el otro lado no podían creer el llamado. Se miraron entre ellos y unos minutos después algunos policías fueron a la casa de Fiorenzo para acompañarlo.
Allí el hombre les contó anécdotas, hicieron un brindis y hasta realizaron unas videollamadas con algunos familiares. Al otro día, los agentes volvieron a la casa de Fiorenzo y le regalaron una foto del momento.
Por la pandemia por el coronavirus y, más aún, por el rebrote en Europa la Navidad se festejó con muchos cuidados, sobre todo con las personas de la tercera edad. Y es por eso que muchas reuniones se cancelaron y hubo mucha gente que la pasó en soledad o rodeada de poca gente.
Lo concreto es que en el mundo la Navidad se celebró de diferentes maneras.