El máximo accionista de Twitter, Jack Dorsey, defendió la suspensión de la cuenta del presidente Donald Trump, como una decisión correcta pero que, al mismo tiempo, sienta un precedente peligroso en una internet global y libre.
El máximo accionista de Twitter, Jack Dorsey, defendió la suspensión de la cuenta del presidente Donald Trump, como una decisión correcta pero que, al mismo tiempo, sienta un precedente peligroso en una internet global y libre.
La decisión adoptada tras el violento asalto al Capitolio protagonizado el 6 de enero por seguidores del presidente fue la adecuada, pero una prohibición de este tipo tiene ramificaciones "significativas" y, a largo plazo, puede "erosionar" el propósito de una internet abierta, señala Dorsey en una serie de tuits.
"El hecho de tener que prohibir una cuenta tiene ramificaciones reales y significativas. Aunque hay claras y obvias excepciones, creo que una prohibición es un fracaso nuestro para promover una conversación saludable. Y un momento para reflexionar sobre nuestras operaciones y el entorno que nos rodea”, aseguró el empresario estadounidense a través de su cuenta.
Asimismo, el CEO de Twitter subraya que "éste es un momento de gran incertidumbre y lucha para muchas personas en todo el mundo" y asegura que su objetivo se dirige a avanzar hacia "un mayor entendimiento" y "una existencia más pacífica en la tierra".
Tras asegurar que no celebra ni se siente orgulloso por haber vetado al presidente estadounidense, Dorsay afirmó que la medida se adoptó después de una "clara advertencia" y en función de las amenazadas surgidas, tanto fuera como dentro de la red social.
Twitter suspendió permanentemente la cuenta de Trump el pasado viernes ante "el riesgo de una mayor incitación a la violencia". Trump había emitido más de 55.000 mensajes durante más de once años y contaba con 89 millones de seguidores en dicha red social.
Rusia comparó el bloqueo de las redes sociales del presidente de Estados Unidos, Donald Trump con una “explosión nuclear” en el ciberespacio. “La decisión de las plataformas de Internet estadounidenses de bloquear al jefe de Estado puede ser comparada a una explosión nuclear en el ciberespacio. La destrucción no es tan terrible como las consecuencias”, dijo la vocera de la Cancillería rusa, Maria Zajarova.
A través de Facebook, “se dio un golpe a los valores democráticos declarados por los países occidentales”, prosiguió. La vocera agregó que “ya comenzó la modificación del mercado de medios y la gran migración digital”. Las palabras de Zajarova llegan después de que Snapchat anunciara su decisión de suspender “de forma permanente” la cuenta de Trump “en aras de la seguridad pública” y por sus “intentos” de “difundir desinformación” e “incitar a la violencia”.
Asimismo, YouTube anunció el pasado lunes la suspensión del canal de Trump durante un periodo mínimo de una semana al considerar que uno de los videos publicados recientemente incitaron a la violencia. Previamente, Facebook había anunciado que suspendía la cuenta de Trump “de forma indefinida” y Twitter la canceló de forma definitiva tras los sucesos en el Capitolio, que se saldaron con al menos cinco muertos, incluido un policía.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, anunció que presentará al G20 el tema de la “censura” en las redes sociales, a raíz del bloqueo por tiempo indefinido de las cuentas de Donald Trump ordenado por Twitter y Facebook, entre otras empresas.
“No deben usarse las redes sociales para incitar a la violencia, pero eso no puede ser motivo de suspender la libertad de expresión, no debe ser usado de excusa, hay que garantizar la libertad. No a la censura”, manifestó López Obrador y adelantó que planteará el debate en la próxima reunión de los 20 países industrializados y emergentes.
El mandatario hizo el anuncio en conferencia de prensa y acompañado por el canciller Marcelo Ebrard, quien explicó que México ya comenzó consultas sobre este tema con países de la Unión Europea (UE) y en ámbitos multilaterales como el G20, que representan alrededor del 85% de la economía mundial.
El líder de uno de los tres países latinoamericanos que pertenecen al G20, junto con Brasil y Argentina, explicó que su postura es que los Estados garanticen la libertad.
“Lo que considero es que no puede haber un organismo particular que decida quitar el derecho que se tiene a la libre manifestación de las ideas; no puede haber un organismo particular en ningún Estado nacional que se convierta en órgano de censura. La libertad debe garantizarse”, subrayó López Obrador.
“Si existe alguna regulación, corresponde a los Estados nacionales, no puede quedar en manos de particulares”, puntualizó.