México, DF. — El gobierno mexicano decidió liquidar la deficitaria
compañía eléctrica estatal Luz y Fuerza del Centro, que provee de energía a la ciudad capital y
otras zonas aledañas, aunque aclaró que no planea su privatización. La decisión afecta a 47 mil
empleados de LyFC, que quedan sin trabajo y serán indemnizados. LyFC registra en 2009 un déficit de
más de 3.000 millones de dólares. La empresa nacional de electricidad se hará cargo del servicio.
En México no existen servicios privados de electricidad desde 1960, cuando se completó la
estatización del sistema.
La sorpresiva decisión se divulgó la noche del sábado, a través de un
decreto firmado por el presidente Felipe Calderón, al tiempo que miles de policías federales
ocupaban las principales instalaciones de la compañía en Ciudad de México y alrededores. El
gobierno dijo que el Estado ya no puede seguir sosteniendo a la compañía, cuyos costos duplican sus
ingresos, en momentos en que existe un grave deterioro en las finanzas públicas debido a la crisis
global. “El funcionamiento de Luz y Fuerza del Centro hoy en día representa un costo tan
elevado que no resulta conveniente para la economía nacional ni para el interés público”,
dijo la Presidencia en el decreto.