Marruecos avanzará sobre las aguas que rodean a las españolas Islas Canarias. Envió dos leyes al Parlamento para correr la línea marítima divisoria, algo que causó indignación y preocupación en España y en especial en las Canarias. Según el ministro de Exteriores marroquí, Naser Burita, el reino del país norafricano "está en su derecho soberano" de ampliar su frontera marítima. La prensa marroquí se hace eco de la indignación que produce el tema en España. Las Canarias, si bien son españolas desde hace siglos y están pobladas por españoles, se hallan justo enfrente de Marruecos, en el Atlántico (ver mapa).
El gobierno marroquí agrega que "no hay ningún malentendido" ante las leyes propuestas, pues no busca "ir más allá" de sus derechos, mientras recuerda que "otros países delimitan su espacio marítimo sin pedir autorización". Los medios españoles replican que "el derecho marroquí de expandir sus fronteras no es tal, pues choca frontalmente con el mismo derecho de España". Marruecos subrayó que está "abierto al diálogo con el país vecino".
En cuanto a la línea imaginaria que delimita las aguas entre los dos países, el canciller marroquí afirmó que es "particularmente complicado".
Sahara y Convención del Mar
En mayo de 2007, Marruecos ratificó la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar y con ella, según argumenta Burita, "quedan obsoletas" las leyes parlamentarias sobre la delimitación de su mar, pues son "anteriores a la recuperación del Sahara" Occidental en 1975, que estaba en manos españolas. La controversia está en que este territorio no es reconocido como marroquí por la ONU, la misma organización por la que se rige Marruecos para expandir su mar. Sin embargo, con la nueva delimitación el reino africano puede tener un "desarrollo científico y tecnológico relacionado con el fondo marino" que permitiría un progreso "inimaginable antes".
La Marina marroquí adquirió en 2018 un buque oceanográfico destinado al estudio del fondo marino y la plataforma continental. Sin embargo, hay estudios científicos que revelan que el monte submarino que busca explotar Marruecos, bautizado Tropic, no se encuentra en la plataforma del continente africano sino es una prolongación geológica de las Islas Canarias, formada por el mismo tipo de vulcanismo que generó el archipiélago.
Marruecos tenía previstas estas dos leyes desde fines de 2017, pero "suspendió el expediente" para no dar argumentos de discusión a la Unión Europea que pudieran "contaminar" la negociación del comercio de la pesca con el Viejo Continente. Asimismo, Marruceos informa que ningún país vecino ha sido avisado oficialmente de este proceso legislativo, pues considera que Marruecos tiene el derecho soberano para no pedir autorizaciones sobre "su legislación interna". Marruecos mantiene un diferendo similar con la vecina Argelia.
Parece claro que Marruecos aprovecha el crónico déficit de España: la falta de un gobierno sólido y bien respaldado derivada de la fragmentación de su electorado a partir de diciembre de 2015. En este momento se prolongan las discusiones entre el socialismo, a cargo del gobierno interino, y las formaciones de izquierda radical y separatistas. Más allá del resultado, no será un Ejecutivo fuerte el que surja de un eventual acuerdo, y eso lo saben los vecinos de España.
El país magrebí destaca que mantiene una relación "serena y tranquila" con España, y con este espíritu es como será abordada esta cuestión mediante, proponen, un diálogo. Del mismo modo, avanzan que la aprobación de estas dos leyes será para principios del 2020.