La paternidad del presidente paraguayo, Fernando Lugo, sigue dando que hablar en el país vecino y
se ha convertido en el centro de las críticas de la oposición hacia el ex obispo, quien hace pocos
días admitió haber mantenido un romance con una chica de 16 años cuando estaba en la Iglesia. Fue
precisamente un diputado "colorado", Víctor Bogado, de la Alianza Nacional Revolucionaria, quien
acusó al mandatario de "llevar a la cama alumnos de colegio".
“No somos nosotros los que escondemos amantes ni quienes llevamos a alumnos de colegio
a sus lechos para luego privar de la identidad a sus hijos”, lanzó el diputado, en alusión a
que Lugo sedujo a Viviana Carrillo Cañete, madre del niño, cuando ella tenía 16 años (hoy tiene
26), de acuerdo con información publicada por La Nación de Paraguay.
En una sesión extraordinaria celebrada ayer, otro de los que magulló al ex obispo fue el
seguidor de Lino Oviedo, José López Chávez, quien planteó la idea de un juicio político contra
Lugo. “Ha roto su compromiso eclesial por una parte, y por otra parte, con el pueblo
paraguayo (…) y aquí se le va demandar. Inclusive esto puede ser el inicio de un juicio
político porque necesitamos gente con moralidad”, afirmó.
En el Senado también se oyeron hipótesis sobre el Lugogate , aunque algunas un poco
inverosímiles, como la del senador Miguel Carrizosa, quien sostuvo: "Me parece correcto lo que
[Lugo] hizo ahora, no lo que hizo antes. Le pido que cuente ya cuántos son los hijos que hay para
que no haya más dudas. Le atribuyen 17 aunque no creo que sean tantos", disparó.
El general golpista Lino Oviedo también opinó sobre Lugo, al que tildó de "farsante". Además,
defendió la "valentía" de Viviana Carrillo en su lucha porque su niño sea reconocido y clamó "¡Viva
Guillermito!", en referencia a lo que calificó como un triunfo del reconocido hijo del presidente
paraguayo.
Mientras el berenjenal de declaraciones cruzadas se desarrollaba, Lugo habló de su hijo. El
mandatario aseguró que, a pesar del escándalo, "cuando me vaya del cargo, volveré a la iglesia
porque nunca la abandoné, sólo dejé el ministerio del sacerdocio" y agregó que su relación con la
madre de su hijo está terminada. A la hora de hablar del pequeño, que dentro de algunas semanas
llevará su apellido, dijo que se siente reflejado en su rostro.