La ONU acusa a Assad de delitos de lesa humanidad

El régimen sirio de Bashar Assad asesinó en cautiverio a miles prisioneros, como parte de una política estatal de "exterminación", denunció un informe de juristas de las Naciones Unidas que imputó al presidente y sus funcionarios de crímenes contra la humanidad y reclamó llevarlos ante los tribunales de La Haya. La guerra civil en Siria comenzó en marzo-abril de 2011, cuando Assad ordenó reprimir con armas pesadass una ola de protestas pacíficas que reclamaban democracia. La oposición pasó entonces a la resistencia armada.

Según el panel de expertos del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, que integran entre otros la ex fiscal de La Haya Carla del Ponte, también la milicia terrorista Estado Islámico (EI) cometió crímenes contra la humanidad al matar y torturar a prisioneros. Otros grupos rebeldes y el Frente Al Nusra —rama siria de Al Qaeda— también son responsables de la muerte de prisioneros, pero en menor medida.

En comparación con lo que ocurre en el campo de batalla, los asesinatos de prisioneros suelen pasar inadvertidos para la opinión pública internacional, advirtió la comisión, que dirige el brasileño Paulo Sérgio Pinheiro. Según los datos, desde marzo de 2011 decenas de miles de personas —en especial hombres y jóvenes de unos 15 años, es decir varones con edad militar— han sido encarceladas por el régimen de Assad. En muchos casos se los encarcela sencillamente por la sospecha de que simpatizan con la oposición. Y muchos de esos hombres y adolescentes no retornan nunca más. Miles siguen "desaparecidos" desde su detención.

Los investigadores recopilaron evidencias abrumadoras y numerosas _más de 600_ de ejecuciones de detenidos, muertes por tortura, hambre o enfermedades no tratadas en prisiones, de las que son responsables las autoridades sirias. Además, denuncian que "superiores civiles en las esferas más altas del gobierno han tenido conocimiento de los crímenes o de las acusaciones de crímenes cometidos por sus subordinados" e ignorado esa información.

Los juristas piden que el Consejo de Seguridad de la ONU adopte sanciones contra los responsables y que se inicie un procedimiento en la Corte Penal Internacional de La Haya. Esto difícilmente ocurrirá: Rusia, firme aliado y que actúa en Siria con su fuerza aérea, defiende a Assad y ya ha vetado varias resoluciones contra su régimen. También China es partidaria de no imponer sanciones al régimen sirio, al que ve como mal menor frente a la amenaza islamista. La comisión también acusa al EI y al Frente Al Nusra de ejecuciones masivas de soldados y ejecuciones de detenidos tras sentencias a muerte impuestas por tribunales ilegales. Además, señala que algunos grupos rebeldes moderados han matado a soldados prisioneros.

Cargos gravísimos. El informe se basa en 600 entrevistas a presos y carceleros. Habla de actos de "exterminio, asesinato, violación, tortura, desaparición forzada y otras actividades inhumanas sobre miles de personas desde 2011". Se trata de auténticos campos de la muerte, con formas industriales de tortura y humillación. El panel está formado por eminentes juristas que trabajan documentando las violaciones de los derechos humanos en Siria desde que comenzó su guerra civil, dijo que fuera del campo de batalla se registra una "violencia masiva y sistematizada" en los lugares de detención, "sean oficiales o informales". La descripción de las prisiones habla de "celdas abarrotadas de presos que tienen que turnarse para dormir porque no pueden tumbarse todos a la vez, infestados de ratas e insectos, sin acceso a agua potable ni servicio médico, con raciones de comida insuficientes y torturas para el que se queja". Paulo Sergio Pinheiro explicó en conferencia de prensa que la acusación de "exterminio" hace referencia a actos que "son parte de una política o práctica institucionalizada que crea condiciones en las que es probable que ocurran muertes a gran escala".