Mientras la atención de todo Brasil está puesta en el Senado, donde todo indica que este miércoles se decidirá la apertura del juicio político contra la presidenta Dilma Rousseff y su suspensión automática, la Justicia avanza contra hombres de primera línea del partido de quien la va a reemplazar interinamente, el vicepresidente Michel Temer. Este es presidente honorario del PMDB (Partido del Movimiento Democrático Brasileño), ex socio y aliado del gobierno de Rousseff.
Un extenso informe del diario Estadao, de San Pablo, señala que después de desmantelar el esquema de lavado de dinero del oficialista PT de Rousseff en Petrobras, el grupo de investigadores conformado tanto en la sede judicial de Curitiba como en Brasilia ha puesto la mira en el sector internacional de Petrobras, que era el área de la empresa estatal que manejaba el PMDB. Sobre la base de la misma ruta adoptada para investigar al PT y su aliado PP en la operación Lava Jato, ahora los fiscales y policías federales trabajan para consolidar la evidencia sobre transferencias ilícitas de los dirigentes del PMDB. Esos movimientos iban a las cuentas off shore de los políticos investigados, según el medio. La "embestida" contra el PMDB coincide con la casi segura llegada al Palacio de Planalto de Michel Temer, vicepresidente de la República y titular honorario del PMDB.
En diálogos reservados, los investigadores del Lava Jato indican que están cerca de revelar datos y transacciones "capaces de producir un impacto directo sobre el llamado núcleo político del esquema" de corrupción, sostenido por los "operadores de sobornos" del PMDB en Petrobras. Se menciona en ese rol, entre otros, al lobbysta del PMDB Joao Henriques, preso desde el año pasado. También se halla en la mira de los fiscales el presidente del partido, el senador Romero Juca, así como el presidente del Senado, Renán Calheiros, y el ya defenestrado ex titular de la Cámara baja, Eduardo Cunha. Se suman el ex ministro y senador Edison Lobo y el senador Valdir Raupp. Si todos estos nombres caen, será una verdadera "matanza" política y judicial y el país quedaría casi a la deriva.
Para operar en Petrobras, el PMDB, como el PT, empleaba un sistema para recoger coimas, así como hacer lavado de dinero en el exterior. La investigación pone la lupa en contratos de plataformas, pozos de petróleo, contratos con multinacionales, adquisiciones y ventas de refinerías fuera del país, como la de Pasadena (EEUU).
Mediante el análisis de estos contratos y de las cuentas off shore usadas para transferir las coimas a los directores de Petrobras, los fiscales están recabando nuevas pruebas de la participación del PMDB en el esquema del Java Jato. Los beneficiarios eran los ex directores del área internacional de Petrobras Néstor Cervero y Jorge Zelada. Ambos están presos en Curitiba desde inicios del año pasado y ya fueron condenados. "La documentación secuestrada corrobora la tesis de que el acusado (Joao Henriques) utilizó empresas off shore a favor del PMDB con desvíos" de fondos del área internacional de Petrobras, reseña uno de los fiscales que acusa a Zelada y Henriques. Este fue detenido el año pasado y denunció la corrupción, acusando a Cunha, para quien abrió una cuenta en Suiza. En este caso se lo acusa de retirar 31 millones de dólares de Petrobras en 2009, bajo órdenes de Zelada. De ese monto, 10,8 millones habrían ido al PMDB, dice el fiscal.
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