Guaidó cerró su gira internacional con un acto en Miami

El líder de la oposición venezolana y reconocido como presidente interino por casi 60 naciones, Juan Guaidó, concluyó ayer una extensa gira internacional en Miami con un acto ante miles de compatriotas que huyeron hacia Estados Unidos en las últimas décadas. En su extensa gira, Guaidó fue recibido por los presidentes o primeros ministros de Colombia, Reino Unido, Francia, Alemania y Canadá, además del jefe de las Relaciones Internacionales de la Unión Europea. También dio un discurso en el Parlamento Europeo.

El "presidente encargado" de Venezuela, Juan Guaidó, instó a los venezolanos a no perder la esperanza de poder regresar a su país, diciendo que hay fortaleza interna para seguir avanzando y que países amigos están discutiendo nuevas opciones para salir del régimen de Nicolás Maduro, incluyendo algunas que están "debajo de la mesa". Ante unos cuatro mil asistentes, Guaidó habló sobre el panorama y las chances de recuperar la democracia en su país. "Creo que está claro que es una mafia a la cual enfrentamos, y miren que la hemos sufrido... todas las opciones están sobre la mesa, pero debajo de la mesa también", dijo el jefe de la oposición venezolana ante las personas que fueron a verlo en un centro de convenciones de Miami. "Porque hay cosas que no se hablan y la intervención ya está pasando en Venezuela: ahí están en los cubanos en Venezuela; ahora, todas las acciones que sean necesarias las vamos a ejercer para liberar definitivamente a Venezuela", afirmó.

Estas declaraciones fueron emitidas ante un coro de voces que pedían la "intervención militar" en Venezuela, al cumplirse un año de que Guaidó se juramentara como presidente encargado. El jefe de la oposición es reconocido como el legítimo presidente de Venezuela por una coalición internacional de casi 60 países encabezados por Estados Unidos y la Unión Europea, además del latinoamericano Grupo de Lima. El gobierno de Donald Trump ha repetido durante este año y antes que "todas las opciones se encuentran sobre la mesa" para resolver la crisis de Venezuela. Entre los países que respaldan a Guaidó hay unanimidad en un punto: el de Maduro no es un gobierno legítimo surgido de elecciones limpias, sino una dictadura apenas disimulada mediante comicios falseados. Pero aparte de este consenso básico, lo demás son diferencias sobre cómo hacer para que Venezuela retorne a la senda democrática. Los europeos no quieren saber nada con una intervención militar, al igual que los latinoamericanos del Grupo de Lima. Solo el exilio y los Estados Unidos mencionan esa posibilidad.

Guaidó trajo a Florida un mensaje de unidad. "Yo les pido más que nunca que nos unamos, lo necesitamos los venezolanos, sobre las diferencias, que no pretendo ocultar. Es el momento de la unión de todos. Ese factor fundamental para terminar de traspasar el umbral de dolor por el cual están traspasando los venezolanos", declaró.