El multimillonario estadounidense Michael Bloomberg hizo anoche su irrupción estelar en la carrera a la Casa Blanca, al enfrentar a cinco rivales demócratas en un debate en Las Vegas que podría alterar el rumbo de la interna partidaria.
El multimillonario estadounidense Michael Bloomberg hizo anoche su irrupción estelar en la carrera a la Casa Blanca, al enfrentar a cinco rivales demócratas en un debate en Las Vegas que podría alterar el rumbo de la interna partidaria.
Bloomberg insiste en que es el mejor posicionado para vencer al presidente Donald Trump y no ha parado de subir en los sondeos pese a que ni siquiera ha participado de ninguna de las internas celebradas hasta ahora y planea saltearse también las otras dos. Los votantes no se pronunciarán sobre Bloomberg hasta el mes que viene, cuando el millonario de 78 años haga su debut en las boletas y las urnas el Supermartes 3 de marzo.
Los inagotables recursos financieros de un empresario cuya riqueza ronda los 60.000 millones de dólares y que ha invertido más de 500 millones en avisos, preocupa a sus adversarios demócratas, que lo han acusado de querer “comprar” la candidatura.
El debate de esta anoche (comenzó a las 23 hora argentina) llegaba en momentos en que los votantes y los sectores moderados de la dirección del partido tratan de hallar una alternativa, que Bloomberg bien podría encarnar, a las políticas “socialistas” del precandidato demócrata Bernie Sanders.
El ex alcalde de Nueva York, con su megafortuna, reuniría además las condiciones para, como mínimo, ser un hueso más duro de roer para Trump que Sanders, cuya posición, tan izquierdista para los parámetros del país, espanta a muchos demócratas e independientes.
A Bloomberg seguramente le espera una recepción hostil de su rivales, luego de haberse afiliado como demócrata recién en 2018 y de su ascenso veloz y sorpresivo de gran donante sin partido a competidor de primera línea por la candidatura presidencial.
La campaña de Bloomberg presentó ayer una larga lista con más de una decena de invitados al debate para la hora 21 del este de Estados Unidos. Entre ellos hay sobrevivientes del tiroteo de Las Vegas que en 2017 dejó 58 muertos y cientos de heridos, y que reflotó el debate sobre la tenencia de armas que arrecia en el país después de cada caso similar, informó CNN. El debate ponía mucho en juego para todos los candidatos, ya que llegaba a días de la que será la tercera elección de la temporada de internas del partido, el caucus (asamblea) del estado de Nevada, el próximo sábado 22.
Luego de más de un año de campaña, el partido aún no encuentra claridad en su urgente búsqueda de un candidato capaz de hacer sombra al apoyo popular y los enormes recursos financieros de Trump, que además se beneficia de una economía robusta.
El ex vicepresidente Joe Biden, quien busca algo de aire para su golpeada campaña, llega al debate junto a otros integrantes del bloque de candidatos de centro a los que les ha ido mejor hasta ahora, el ex alcalde Pete Buttigieg y la senadora Amy Klobuchar.
Sanders, senador por Vermont, se ha erigido en la clara preferencia de la izquierda demócrata, mientras que su rival por el voto progresista, la senadora Elizabeth Warren, hace esfuerzos por recuperar algo de energía para su campaña.
Algunos demócratas temen que la pelea a mano limpia transmitida en vivo a todo el país agrave las divisiones dentro del partido y que resienta sus chances de evitar un segundo mandato, cuatro años más, de Trump.
Hasta ahora, la campaña de Bloomberg se ha caracterizado por actos cuidadosamente organizados, publicidad de radio y TV de niveles sin precedentes y un aparato nacional con cientos de asesores y miles de militantes de base y voluntarios pagos.
Fuentes de la campaña de Bloomberg dijeron que no tienen grandes expectativas sobre su desempeño, luego de más de 10 años desde su última elección. Bloomberg no ha estado en un debate televisado desde 2009.