Caracas. — Los trabajadores de la Siderúrgica del Orinoco (Sidor)
paralizaron la producción de la planta y la tomaron, tras el anuncio de nacionalización de la
empresa de capitales argentinos por el gobierno del presidente Hugo Chávez. En Buenos Aires, el
grupo Techint reiteró su pedido de reconsideración de la nacionalización al presidente
venezolano.
El Sindicato Unitario de Trabajadores de la Industria Siderúrgica y Similares
(Sutiss) explicó que tomó la medida para "evitar irregularidades", mientras el gobierno decide cómo
ejecutar el proceso de estatización de la compañía, anunciada el miércoles.
"Están paralizados ahora y hasta nuevo aviso", dijo a la agencia de noticias
Reuters el líder del sindicato Sutiss, José "Acarigua" Rodríguez, un feroz adversario de Techint, y
quien reclamó repetidamente la estatización de la empresa al gobierno de Chávez.
Una fuente de la empresa confirmó la paralización de la planta y agregó que
estaban detenidos 300 camiones y dos buques. Además, dijo que Sidor ha pedido la intervención del
gobierno para superar el bloqueo, que calificó de ilegal, y que perjudica obviamente a la cadena
productiva de la siderúrgica.
Los líderes sindicales planeaban ayer un encuentro con el ministro de Industrias
Básicas y Minería, Rodolfo Sanz, para coordinar directivas de funcionamiento y contraloría de la
firma durante las negociaciones. "Tenemos suspendidos los despachos hasta que nos pongamos de
acuerdo con el gobierno", acotó Nerio Fuentes, secretario general del sindicato, dejando así de
lado a la empresa como interlocutor. Según el sindicalista, las operaciones de producción "no han
sido afectadas" y se formó una comisión de trabajadores, que "vigila el centro de operaciones de la
planta" para evitar "salida de información". Esto significa, de hecho, la ocupación de la empresa
por el sindicato, afín al gobierno de Chávez.
Pedido de reconsideración. En tanto, la gerencia de planificación de Techint
espera que el presidente venezolano retroceda en su decisión de estatizar la siderúrgica. Desde
Buenos Aires, el gerente de planificación, Luis Felipe Domínguez, señaló que no descarta que Chávez
"reflexione" sobre la medida y destacó los aportes que hicieron los capitales argentinos,
italianos, mexicanos y venezolanos para posicionar a la siderúrgica venezolana. Sidor era estatal
hasta 1997 y altamente deficitaria y retrasada tecnológicamente. Ese año fue privatizada y comprada
por Techint.
"Confiamos en que el presidente pueda reflexionar, sabemos que es una persona
sensible. Siempre hay espacio para la rectificación cuando las cosas se hacen de buena fe y lo que
se busca es progresar. No podemos descartar un espacio para esta rectificación", comentó
Domínguez.
Momento clave.Domínguez explicó que el anuncio de estatizar la siderúrgica llegó
en un momento en que la empresa se preparaba para hacer una oferta salarial al sindicato que, según
cree, finalizaría el largo conflicto.
Agregó el ejecutivo que el sindicato "se presentó como la víctima" en el último
tramo de la discusión, lo que precipitó la intervención del gobierno al más alto nivel. Chávez
ordenó la estatización esta semana, luego de amenazar con hacerlo en reiteradas oportunidades en
los últimos años. Techint recurrió en esos casos al gobierno de Néstor Kirchner para que aplacara
los ánimos del venezolano. Esta vez ese mecanismo no funcionó: en Buenos Aires, aseguran, todos se
enteraron de la estatización "por los diarios".
La empresa argentina le pidió al líder venezolano que reconsidere la
estatización