El 55 por ciento de los británicos votará a favor de la salida de Reino Unido de la Unión Europea y sólo el 45 por ciento por quedarse en el bloque en el referéndum convocado el próximo 23 de junio. Así lo señala una encuesta online elaborada por el instituto ORB por encargo del diario The Independent. Los datos suponen un aumento considerable de la cifra de defensores del conocido "Brexit" (combinación de palabras entre el nombre del país y "exit", salida).
En abril lo defendía el 51 por ciento, frente al 49 por ciento que abogaba por la permanencia. Hace un año los defensores de permanecer en el bloque europeo superaban a los detractores en más de un diez por ciento. La mayoría de los votantes laboristas sufragrará a favor de seguir en la UE, según la nueva encuesta, para la que se ha consultado por internet a 2.000 británicos el miércoles y el jueves. Antes de esta consulta las encuestas ya indicaban un aumento de la cifra de defensores del "Brexit".
Los expertos llaman sin embargo a interpretar con cautela las encuestas. En las elecciones legislativas de hace un año las consultas demoscópicas no acertaron, y el conservador Davi Cameron se impuso con una amplitud que dejó en ridículo a encuestadores y diarios nacionales. El eurodiputado británico Nigel Farage, uno de los principales impulsores de la campaña de salida de su país del bloque, dijo al diario italiano Corriere dela Sera: "Este referéndum es el acontecimiento más importante desde 1957. La UE está ante su colapso". Farage, líder del partido antieuropeo UKIP, agregó: "Vamos a tener un efecto dominó. Después de nosotros se marcharán otros países del Norte (europeo), uno tras otro. Dinamarca fue el primero, luego le seguirán Holanda, Suecia, Austria".
Farage se mostró convencido de que los británicos respaldarán el "Brexit". Este panorama hará que, naciones del Sur como Italia, Grecia o España saquen provecho, puesto que el euro, como moneda común de la UE "destruye" su economía y es también "un arma para la hegemonía alemana", afirmó Farage.
El premier David Cameron intentó manejar el descontento con la UE y convocó al referendo, pero con una postura a la vez crítica con Europa y de no abandonar el bloque. Buscó usar el referendo para arrancar a la UE grandes concesiones. Ahora, si realmente ocurre el "Brexit", ese juego podría revelarse muy imprudente. La salida de Reino Unido de la Unión Europea (UE) tendría graves consecuencias en la economía de todo el continente, advirtieron expertos alemanes. "El 13 por ciento de los ciudadanos europeos residen en Reino Unido y ese país representa el 17 por ciento de la fuerza económica europea. Su salida del bloque no sería fácil de resistir", afirmó Achim Wambach, presidente del instituto de investigaciones económicas ZEW.
Aunque la incertidumbre sería mayor en Reino Unido, en toda Europa se sentirían los efectos de un "Brexit", alertó. "La coyuntura de la UE es muy sensible. Cualquier noticia negativa puede influir". Wambach consideró que si en el referéndum del 23 de junio los británicos deciden separarse del resto de Europa, las inversiones privadas disminuirán. "Muchos estudios han llegado a la conclusión de que las cifras de desempleo aumentarían y de que el producto nacional bruto retrocedería", indicó añadiendo como consecuencia, "un retroceso de la coyuntura sería muy probable".
Por otro lado, el experto apuntó que la libra esterlina perdería valor aunque la fuerte incertidumbre en la zona euro llevaría también a un debilitamiento de la moneda única europea frente al dólar. También el director general de finanzas del grupo alemán Continental, Wolfgang Schaefer, cree que la decisión perjudicaría y debilitaría no sólo a Reino Unido, sino a toda Europa. "Nos alegraríamos mucho de que permaneciese en el bloque", dijo en Hannover. Sin embargo, el gran fabricante de neumáticos no cree que su negocio se vería afectado, dado que Reino Unido apenas representa el 3 por ciento de la facturación global de la empresa. "Damos por hecho que en el caso de un Brexit seguiríamos vendiendo exitosamente neumáticos aunque aumentase el riesgo monetario", concluyó.