Para la agencia Associated Press, es muy probable que este martes por la noche los estadounidenses no conozcan al ganador de las elecciones presidenciales. No sería señal de que algo sea fallido, fraudulento, corrupto o malo, aclara la agencia de noticias.
El presidente Donald Trump ha sugerido reiteradamente que un resultado más lento de lo normal será indicio de problemas. "Creo que es terrible que no podamos conocer los resultados de una elección la noche de la elección'', dijo el domingo. "Creo que es algo terrible cuando se permite a los estados tabular las boletas durante un largo tiempo después de que terminan las elecciones''.
No está claro lo que el presidente piensa que es un período largo. Pero es una práctica estándar seguir contando votos después del día de las elecciones.
El factor más importante que puede volver lentas las cosas es claro: millones de estadounidenses decidieron votar por correo en vez de arriesgarse a contraer el coronavirus en el lugar de votación. Y, en general, los votos postales tardan más en contarse. Los trabajadores electorales deben sacar las boletas de sus sobres, verificar si hay errores, clasificarlas y aplanarlas, todo antes de que puedan pasar por los escáneres en el momento en que las urnas cierran y se tabulan. En los estados con programas de voto por correo bien establecidos, este procesamiento se realiza semanas antes del día de las elecciones. Los resultados se publican rápidamente.
Pero varios estados no tenían este sistema en vigor antes de este año y las leyes vigentes prohíben a los funcionarios electorales procesar las boletas antes del día de las elecciones. Prácticamente no hay forma de procesar y contar todos los votos por correo el día de las elecciones, y al mismo tiempo contar todos los sufragios emitidos en persona.
Hay tres estados "campos de batalla" importantes con restricciones sobre cuándo se puede procesar el voto por correo: Michigan, Pensilvania y Wisconsin. En esos estados, las legislaturas, donde los republicanos son mayoría, se han resistido a los ruegos de los funcionarios electorales para actualizar las leyes para permitir un conteo más rápido. En cambio, inicialmente informarán los votos en persona, que se espera favorezcan en gran medida a Trump, y actualizarán gradualmente con las boletas por correo, más de tendencia demócrata, más tarde.
Nunca ha habido una contienda presidencial en la historia en la que todos los votos se cuenten la noche de las elecciones. Simplemente no es físicamente posible contar de inmediato tantas boletas, posiblemente hasta 150 millones.
Los medios de comunicación, incluida The Associated Press, declaran ganadores en miles de contiendas la noche de las elecciones en función de los resultados preliminares, las encuestas de votantes y otros datos políticos. Pero en una elección reñida, es posible que sea necesario contar más votos antes de que AP u otro medio pueda declarar un ganador.
Por supuesto. No todos los estados son de escrutinio lento. Entonces, si varios estados clave publican sus resultados con prontitud, un candidato puede tener la mayoría de los votos electorales, incluso sin saber quién ganó en Wisconsin, Pensilvania o Michigan.
Es un escenario que apunta los reflectores hacia Florida. El estado permite que sus oficinas electorales procesen las boletas por correo 22 días antes de la elección y, a menos que surja otra cosa, podría haber un conteo casi completo para la medianoche. Y si Trump pierde Florida, le será muy difícil alcanzar los 270 votos electorales que necesita para derrotar a Joe Biden y mantenerse en la Casa Blanca.
Otros dos campos de batalla del sur, Carolina del Norte y Georgia, también pueden comenzar a procesar antes las boletas por correo. Ambos son considerados estados decisivos para Trump. Sin embargo, a diferencia de Florida, ninguno de los dos estados tiene antecedentes de manejar una gran cantidad de boletas por correo, por lo que no está claro qué tan rápido contarán esos votos.
Iowa y Ohio también permiten el procesamiento temprano de las boletas por correo. Trump ganó fácilmente ambos estados en 2016, pero los demócratas creen que Biden es competitivo allí. Los resultados en esos dos estados esta noche podrían dar pistas sobre lo que se avecina en los estados decisivos del centro del país, que tardan más en contarse.
El seguimiento de los resultados en las elecciones de esta noche podría ser confuso. Eso se debe a que ambos partidos están votando de dos maneras muy distintas. Los demócratas se han lanzado a votar por correo, mientras que Trump ha exhortado a los republicanos a votar hoy, el día de las elecciones. Dependiendo del tipo de voto que es informado _los votos por correo, los sufragios realizados en persona en centros de votación anticipada y los votos emitidos hoy, día de la elección_, los resultados podrían inclinarse a favor de un candidato.
En general, los estados de procesamiento adelantado _Florida, Georgia, Ohio y Carolina del Norte_ informarán primero los resultados de la votación por correo. Esos tenderán al lado demócrata. Pero luego esos estados empezarán el conteo de los votos en persona, los cuales se inclinarían hacia los republicanos. Así que los resultados preliminares podrían ser marcadamente demócratas antes de tornarse más republicanos conforme pasa la noche.
Pero la tendencia podrían ser la opuesta en estados "oscilantes", como Michigan, Pensilvania y Wisconsin. En ellos, primero será informado el voto del día de la elección, de fuerte tendencia republicana, lo que podría ser engañoso (un "espejismo rojo'', porque este color es el de los republicanos). Eso se debe a que los demócratas podrían remontar una vez que los votos enviados por correo sean tabulados en las horas y días posteriores, lo cual es llamado el "desplazamiento azul'' (porque este es el color de los demócratas).