El Papa Francisco recibió ayer juntos y por separado al presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, y al ex mandatario y jefe de la oposición Alvaro Uribe, pero su mediación no logró que ambos superaran sus diferencias en torno al proceso de paz con la guerrilla de las Farc. Francisco se reunió primero con Santos y a continuación con Uribe. Finalmente recibió a ambos en una audiencia de 25 minutos. El Pontífice argentino recibió a Santos en la Sala del Tronetto con un "bienvenido, es un placer reencontrarnos, es la tercera vez que nos vemos". "Necesitamos su ayuda", le dijo a su vez el presidente colombiano. Santos ofreció como regalo al Papa el "balígrafo" —una bala convertida en bolígrafo— con el que se firmó el acuerdo de paz con el líder de las Farc (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia), Rodrigo Londoño. También le entregó una pequeña escultura de porcelana que representa una orquídea blanca, la flor nacional de Colombia.