Estados Unidos "está evaluando" un posible cierre de su embajada en Cuba tras los ataques acústicos que han afectado por lo menos a 21 de sus funcionarios, anunció el secretario de Estado, Rex Tillerson.
Estados Unidos "está evaluando" un posible cierre de su embajada en Cuba tras los ataques acústicos que han afectado por lo menos a 21 de sus funcionarios, anunció el secretario de Estado, Rex Tillerson.
La posibilidad "está siendo evaluada. Se trata de un asunto muy serio por el daño que algunos individuos han sufrido. Algunos de ellos han sido repatriados", declaró el jefe de la diplomacia estadounidense en una entrevista con el canal de televisión CBS.
Con el número de víctimas en aumento, al menos 21 a la fecha, y sin explicaciones sobre el origen de los ataques, legisladores estadounidenses siguen pidiendo el cierre de la sede diplomática.
La embajada de Estados Unidos en La Habana reabrió sus puertas en 2015 bajo la administración de Barack Obama, tras medio siglo de ruptura de relaciones diplomáticas.
Pero desde finales de 2016, 21 funcionarios estadounidenses de la embajada y algunos diplomáticos canadienses han manifestado síntomas físicos, sobre todo pérdida de audición, migrañas y náuseas y han tenido que recibir asistencia médica, algunos de ellos en Estados Unidos. Se cree que el régimen comunista aplica ultrasonido a la zona de la embajada. Es una típica jugada de los tiempos de la Guerra Fría, pero que reaparece ahora.
Los incidentes comenzaron en 2016 y el último de ellos fue registrado en agosto pasado. Y a pesar de que las autoridades estadounidenses se quejaron ante sus pares cubanos y expulsaron a dos diplomáticos de ese país de la legación en Washington en mayo, el problema no tuvo solución alguna de parte del régimen cubano.
La cancillería estadounidense, que calificó estos ataques de "sin precedentes", advirtió al gobierno cubano que es responsable de la seguridad de los diplomáticos que trabajan en la isla.
El American Foreign Service Association, el sindicato de la diplomacia estadounidense, explicó que "los diagnósticos incluyen ligeras lesiones cerebrales de origen traumático y pérdida permanente de audición, pérdida de equilibrio, fuertes migrañas, problemas cognitivos y edemas cerebrales". Canadá también informó que uno de sus diplomáticos en Cuba sufrió pérdida de audición y dijo que trabajaba "activamente" para averiguar lo sucedido.