El aeropuerto londinense de Gatwick, el segundo más importante del Reino Unido, suspendió ayer sus vuelos después de que las pistas fueran cerradas por la presencia de dos drones, lo que afectó a miles de pasajeros y fue calificado por el gobierno como un "acto deliberado". "Cada vez que tratamos de llegar cerca del operador, los drones desaparecen. Cuando vemos si reabrimos la pista, vuelven a aparecer. Estoy totalmente convencido de que es un acto deliberado para interrumpir el aeropuerto de Gatwick", afirmó Justin Burtenshawel, superintendente de la policía de Sussex, el condado donde está ubicado el aeropuerto. No obstante, el oficial señaló que "no hay absolutamente ninguna indicación que señale que esto está relacionado con el terrorismo".
Dada la velocidad a la que despegan o aterrizan los aviones, el impacto con uno de estos artefactos conllevaría un riesgo grave de seguridad, según expertos, por lo que las operaciones fueron canceladas en su totalidad. Las Fuerzas Armadas británicas se sumaron al despliegue policial activado en Reino Unido para hacer frente al caos en que se vio sumido desde el miércoles por la noche el aeropuerto londinense de Gatwick, paralizado por la presencia de varios drones. La policía se puso en contacto con el Ministerio de Defensa para solicitar la asistencia militar. "Vamos a desplegar a las Fuerzas Armadas para darles la ayuda que necesitan", confirmó el ministro de Defensa, Gavin Williamson.
El aeropuerto al sur de la capital —el segundo de Gran Bretaña en cuanto a afluencia de pasajeros— cerró su pista el miércoles por la noche (aproximadamente 21 horas) al avistarse dos drones. Reabrió a las 3 de la mañana de ayer, pero cerró apenas 45 minutos después cuando se avistaron otros, y permanecía anoche todavía cerrado.
El responsable de operaciones de Gatwick, Chris Woodroofe, dijo que unas 100.000 personas se vieron afectadas por el cierre, y algunas de ellas pasaron varias horas dentro de los aviones sin poder despegar ni descender de las aeronaves. Funcionarios informaron que, hasta el momento, se cancelaron la mayoría de los 765 vuelos previstos para ayer.
Voceros policiales precisaron que unas 6.000 personas que tenían previsto llegar ayer a Gatwick lo hicieron a otras terminales del Reino Unido después de que sus vuelos fuesen desviados. Además, "otras 2.000 personas no despegaron de sus aeropuertos de origen y había otras 2.000 personas aquí (en Gatwick) que no volaron a sus destinos", según afirmó un portavoz policial.
En el Reino Unido es ilegal utilizar estos aparatos voladores dirigidos por control remoto a un kilómetro de los aeropuertos. La secretaria de Estado para la Aviación, Liz Sugg, declaró a BBC que "estos drones han estado volando ilegalmente y los operadores, que han actuado de manera increíblemente irresponsable, pueden afrontar hasta cinco años de cárcel". "Estamos en estrecho contacto con el aeropuerto de Gatwick y trabajando con la policía para resolver de manera segura esta situación lo más pronto posible", añadió Sugg.
Gatwick se encuentra unos 50 kilómetros al sur de Londres, la capital del país, y es uno de los aeropuertos con mayor tráfico aéreo de Europa, junto con el de Heathrow. Se estima que unas 2,9 millones de personas pasan por este aeropuerto durante la actual temporada de vacaciones navideñas.