La condición del presidente Hugo Chávez pasó de "estable a favorable" tras haber sufrido una hemorragia durante la cirugía a la que fue sometido en Cuba por un cáncer, pero su recuperación requerirá de un tiempo "prudencial", dijo ayer el gobierno venezolano, a menos de un mes para que asuma un nuevo mandato. Los anuncios sobre la delicada situación de salud del militar retirado de 58 años y la designación del vicepresidente Nicolás Maduro como su potencial sucesor han hecho pensar a los venezolanos que los 14 años de socialismo estarían cerca de su fin, a pesar del nuevo período que Chávez ganó en octubre.
"En las últimas horas dicho proceso de recuperación ha evolucionado de estable a favorable, lo cual da pie para mantener el diagnóstico de una recuperación creciente en la situación del comandante Hugo Chávez", dijo Maduro anoche luego de comentar la complicación por el sangrado. El también canciller lució visiblemente acongojado y con la voz ronca y confesó estar viviendo "horas de dolor, tristeza, incertidumbre".
No obstante, la información proporcionada a los militantes chavistas por el vicepresidente ejecutivo de Venezuela complementó, pero agregó una dosis de mayor esperanza, a lo anunciado ayer al mediodía por el ministro de Comunicación, Ernesto Villegas, quien informó sobre una "progresiva y favorable recuperación" de sus signos vitales de Chávez tras la operación del martes, aunque sufrió complicaciones, debidao a una hemorragia".
Villegas, reveló que Chávez presentó un "sangramiento" durante la intervención de seis horas en Cuba —la cuarta a la que se sometió en los últimos 18 meses—, pero que logró ser detenido con la aplicación de medidas correctivas. "Este proceso de recuperación, no obstante, requerirá un tiempo prudencial, como consecuencia de la complejidad de la intervención practicada", agregó Villegas para luego comentar sin detalles que se aplicarían tratamientos específicos adicionales.
Ceremonias religiosas. En tanto, en Venezuela y en varios países de la región se siguieron repitiendo actos de apoyo al presidente y ceremonias religiosas de diversos cultos en las que los seguidores de Chávez volvieron a pedir por su salud. El presidente de Uruguay, José Mujica, quien a pesar de ser un no creyente declarado participó en Montevideo de un encuentro para orar por la salud de Chávez, anunció su intención de viajar a Cuba para apoyar a su par venezolano porque, dijo, "en la vida hay que ser agradecido". Chávez "ayudó" a Uruguay y "tengo y tenemos la obligación de no olvidarnos", dijo Mujica, aunque condicionó ese viaje a la autorización previa de los médicos que atienden al mandatario en La Habana.
El miércoles fue el presidente de Perú, Ollanta Humala, quien afirmó que si era necesario estaba dispuesto a visitar a Chávez en Cuba, y le envió sus mejores deseos. "Fuerza presidente Chávez; acá estamos orando por su salud; el pueblo peruano se solidariza y le da fuerza a usted para una pronta mejoría", dijo Humala.
Pronunciamiento de Castro. El presidente de Cuba, Raúl Castro, expresó ayer su "afecto" y "solidaridad" a su homólogo Hugo Chávez, en el primer pronunciamiento público del gobierno cubano desde que el mandatario venezolano volvió a la isla para operarse de cáncer. "En esta hora crucial para Venezuela y nuestra América, estaremos como siempre junto al presidente Chávez y a la revolución bolivariana", citó ayer la agencia Prensa Latina a Castro en su discurso de clausura del pleno parlamentario cubano.
Por su parte el mandatario colombiano, Juan Manuel Santos, tuvo palabras de elogio para Chávez al destacar su papel en el proceso de paz que su gobierno negocia con la guerrilla de las Farc, también en Cuba.
