Ante la imposibilidad de que el Congreso estadounidense levante en lo inmediato el bloqueo económico a Cuba, el presidente Raúl Castro quiere que su homólogo Barack Obama acelere de aquí al final de su mandato las medidas para suavizar su alcance. Cada uno con su libreto, el estadounidense a su vez renovó su compromiso de "la protección de los derechos humanos" en suelo cubano. Raúl Castro y Obama se reunieron ayer en la Asamblea General de la ONU, el segundo tras el anuncio en diciembre de la normalización de las relaciones bilaterales entre los dos países. Pero es el primero que mantienen desde que ambos países reabrieron sus embajadas, y tras la reciente visita del Papa a La Habana y Washington.
En un "ambiente respetuoso y constructivo", Castro, presente por primera vez en la gran cita anual de la ONU, reiteró a Obama la condición de levantar el embargo para normalizar las relaciones bilaterales. "El presidente cubano reiteró que para que haya relaciones normales entre Cuba y Estados Unidos debe ser levantado el bloqueo que causa daños y privaciones al pueblo cubano", dijo el canciller Bruno Rodríguez al final de esa reunión.
La Casa Blanca dijo que ambos hablaron de las medidas adicionales que cada gobierno puede tomar para impulsar la cooperación y que Obama insistió en que iba a promover los derechos humanos en la isla, uno de los aspectos que más tensiones causa entre los dos países. Los mandatarios pusieron en marcha un acercamiento que ya incluye la reanudación de las relaciones diplomáticas con la reapertura de embajadas. Pero el levantamiento del bloqueo comercial es una facultad del Congreso, que es controlado por los republicanos quienes no han mostrado inclinación alguna por dar ese paso. Obama, no obstante, sigue adelante con su proyecto y ha tomado una serie de medidas para facilitar los viajes a Cuba y fomentar los lazos entre las dos naciones.
"El ritmo del proceso de normalización de las relaciones bilaterales dependerá del levantamiento del bloqueo, que la realidad del bloqueo sea modificada sustancialmente mediante las muy amplias facultades que tiene el presidente de Estados Unidos", agregó Rodríguez. En efecto, y según las autoridades cubanas, Obama tiene la capacidad ejecutiva de cambiar "muchos elementos de la aplicación del bloqueo". El Congreso es el único facultado para desmontar el embargo, un entramado legal vigente desde 1962 que está codificado en varias normativas, la más completa de ellas la ley Helms-Burton de 1996.
No obstante Obama puede ordenar la modificación de aspectos del bloqueo, como ya lo hizo con el levantamiento de numerosas restricciones, más recientemente a mediados de mes cuando eliminó el límite de 2.000 dólares de remesas hacia la isla y autorizó a estadounidenses a tener empresas en Cuba. En ese sentido, el mandatario estadounidense puso de relieve los cambios regulatorios que "permitirán viajar y hacer negocios a más estadounidenses en Cuba", según un comunicado de la Casa Blanca.
Diálogo. El canciller cubano dijo esperar que entre las próximas medidas de Obama figure la de autorizar a todos los estadounidenses a viajar libremente a Cuba. Rodríguez reseñó que los dos países están ya dialogando en numerosas áreas como el medio ambiente, la lucha contra el narcotráfico, la búsqueda y salvamento de personas en el mar, el terrorismo, la salud o los servicios de correos, y remarcó que Cuba está dispuesta a discutir un proceso de reparaciones económicas para resolver los reclamos mutuos. Mientras La Habana pretende un resarcimiento económico por las seis décadas de bloqueo, Washington quiere otro tanto por el proceso de estatización de sus empresas que siguió a la Revolución del 59.
Sobre la cuestión de Guantánamo, Rodríguez dijo que es "un elemento de alta prioridad en el proceso de normalización", exigiendo el cierre de la base y la devolución del territorio "ilegalmente ocupado".
Los mandatarios "intercambiaron puntos de vista" sobre la reciente visita del Papa Francisco a ambos países. La intervención del Pontífice fue crucial en la normalización de relaciones entre ambos países.
Encrucijada
El canciller Rodríguez dijo que, como todos los años, Cuba presentará el 27 de octubre una resolución ante la ONU para pedir el fin del bloqueo. Ante la nueva política impulsada por Obama, Rodríguez dijo desconocer cómo votará EEUU este año. Agregó que espera con la misma curiosidad que el resto. “Estaré esperando el 27 de octubre a ver qué ocurre”, dijo.