Francia logró la extradición del extremista islámico que sería el "cerebro" de los ataques del 7 de enero de 2015 contra el semanario satírico Charlie Hebdo, cuando una célula yijadista asesinó a 12 personas.
Francia logró la extradición del extremista islámico que sería el "cerebro" de los ataques del 7 de enero de 2015 contra el semanario satírico Charlie Hebdo, cuando una célula yijadista asesinó a 12 personas.
La fiscalía de París dijo que Peter Cherif fue extraditado a Francia tras ser arrestado en Djibouti, en Africa, y fue arrestado de inmediato al llegar al aeropuerto Charles de Gaulle de París. También se le presentaron cargos. Se le acusa de asociación criminal con una entidad terrorista. El ministro de Defensa de Francia dijo que Cherif jugó un "papel importante en la organización" del ataque contra Charlie Hebdo.
Cherif, también conocido como "Abu Hamza", era amigo cercano de los hermanos Said y Cherif Kouachi, que asesinaron a tiros a 11 personas en la redacción de Charlie Hebdo y a un policía en las calles de París. Cherif había viajado a Irak y Siria a principios de la década de 2000, y estaba prófugo desde 2011.
Para muchos analistas, Peter Cherif, es la "mente" del ataque al semanario satírico. El hombre, que tiene 36 años, había estado huyendo desde 2011. Hasta ahora, Cherif era uno de los terroristas más buscados del mundo. Conocido en su juventud por la policía por ser un ladrón menor, luego se convirtió al islam radical. Cherif ha luchado durante años en Irak y Yemen, país desde el cual se emitió la orden de "vengarse" por la publicación de las caricaturas de Mahoma en Charlie Hebdo. Cherif aparece en la investigación porque mantenía un intercambio regular con los hermanos Kouachi, los autores del sangriento ataque, que el 7 de enero de 2015 costó la vida a 12 personas, incluidos caricaturistas y periodistas. Los hermanos Kouachi fueron abatidos unos días después al final de una persecución por gran parte de Francia. El tremendo ataque a Charlie Hebdo dejó al semanario sin sus principales figuras, todas asesinadas. Además, infiltró el miedo en otros medios similares, que se cuidan de bromear con el islam y Mahoma.
En tanto, el presidente francés Emmanuel Macron prometió apoyar la lucha contra extremistas islámicos en Africa. De visita en Chad, Macron aseguró que no habrá reducciones de gastos militares, porque la amenaza "es constante y cambiante". Francia gastará cientos de millones de euros en programas para mejorar las economías y evitar que los extremistas islámicos "ganen terreno".