Con 881 muertos en 24 horas, Brasil registró otro récord en la pandemia del coronavirus y llegó a 12.400 decesos . El número de personas diagnosticadas con Covid-19 en el país aumentó a 177.589, la cifra más alta de América Latina. Los datos fueron publicados por el Ministerio de Salud.
El de ayer es el mayor número de muertes por Covid-19 jamás registrado en un solo día desde que comenzó la epidemia en Brasil. En comparación con el lunes, el número aumentó 7 por ciento. El récord diario anterior fue el 28 de abril, cuando el país registró 474 decesos.
El gobierno de Jair Bolsonaro enfrenta fuertes críticas por su manejo de la pandemia.
Con sus hospitales saturados y ante el aumento en el número de muertes por coronavirus, los gobiernos estatales y municipales de Brasil han comenzado a imponer cuarentenas obligatorias que contravienen la voluntad del presidente, quien dice que la pérdida de empleos es más dañina que el Covid-19.
La movilidad de los brasileños ha sido totalmente restringida en menos de dos docenas de ciudades dispersas a través del extenso país de 211 millones de habitantes, aun cuando el número de muertos en Brasil es de 12.400, el mayor en la región.
Aunque los expertos en salud pública exigen medidas más enfáticas, la mayoría de los gobernadores y alcaldes no han emitido órdenes de confinamiento para la población. En tanto, Bolsonaro manda el incesante mensaje de que los brasileños desafíen las medidas de salud pública locales y regionales para contener la propagación del virus.
Las cuarentenas más estrictas son necesarias porque los médicos brasileños ahora se ven obligados a escoger entre quién vive y muere, y, si aumentan las situaciones de triaje, podrían generar inquietud entre la sociedad, dijo Miguel Lago, director ejecutivo del Instituto de Estudios para Políticas de Salud que asesora a funcionarios de salud pública en Brasil.
"Tenemos que evitar un desastre total", comentó.
Gobernadores de 13 de los 26 estados que componen Brasil y el Distrito Capital se han negado a acatar la orden de Bolsonaro de reabrir los salones de belleza y centros deportivos tras el cierre impuesto por las autoridades regionales.
Así lo han manifestado los gobernadores de Río de Janeiro y Sao Paulo, los más combativos, así como los del Distrito Federal, Pernambuco, Amazonas, Paraiba, Alagoas, Sergipe, Paraná, Bahía, Ceará, Piauí, Goiás y Pará. En Rio Grande do Norte las peluquerías ya están funcionando por decisión de las autoridades regionales pero no reabrirán los gimnasios.