El ex primer ministro italiano Silvio Berlusconi, condenado en firme por fraude fiscal, podrá cumplir su pena realizando trabajos comunitarios en una residencia de ancianos, eludiendo así un arresto domiciliario, según decidió ayer un tribunal en Milán. Berlusconi fue condenado en agosto del año pasado a cuatro años de cárcel, pero tres le fueron perdonados por una ley de amnistía. La condena incluyó el pago de una multa de diez millones de euros (13,8 millones de dólares). El dirigente, de 77 años, no tiene que ir a prisión debido a su avanzada edad.
Berlusconi tendrá que realizar trabajos sociales un día a la semana durante al menos cuatro horas seguidas, probablemente en un geriátrico cercano a su mansión Villa Ancore, a las afueras de Milán, que se hizo tristemente famosa por sus fiestas sexuales llamadas "bunga bunga". Uno de ellos, el centro de la localidad Cesano Boscone, en las afueras de Milán, es una suerte de clínica de lujo, con teatro, campo de fútbol, talleres, iglesia y hasta cementerio, pertenece a la organización católica Fundación Sagrada Familia y ofrece asistencia a más de dos mil personas.
Mientras cumpla su pena, Berlusconi en principio no podrá salir de la región donde tiene su residencia, Lombardía. Su pasaporte ya le fue retirado cuando fue condenado en firme, en agosto de 2013. Sin embargo, sí puede trasladarse a Roma de martes a jueves para cumplir con sus compromisos políticos. Tendrá que estar de regreso en su casa los jueves a las 23 horas.
Fallo "equilibrado". Los abogados del ex primer ministro, Franco Coppi y Niccolo Ghedini, expresaron su conformidad con el fallo calificándolo de "bien equilibrado y satisfactorio" porque los jueces reconocieron las actividades políticas que Berlusconi tiene que desarrollar. Los abogados del multimillonario y tres veces primer ministro habían propuesto que Berlusconi pudiera realizar los trabajos sociales en una institución para personas discapacitadas cerca de su residencia Villa Arcore, pero los jueces rechazaron esta opción y se decidieron por una residencia de ancianos, tal como había propuesto la fiscalía. A Berlusconi la opción de los servicios a la comunidad le da mayor libertad de movimiento que un actual arresto domiciliario. Con miras a las elecciones europeas del 25 de mayo, se prevé que el ex primer ministro esté de regreso en Roma mañana para presentar a candidatos y un manifiesto electoral.
Aunque no puede presentarse como candidato, Berlusconi, quien fue expulsado del Senado en noviembre, sigue siendo la figura de referencia de su partido de centroderecha, Forza Italia, que está sumido en una profunda crisis.
La condena de un año de prisión domiciliaria puede ser reducida a diez meses y medio por buena conducta si ésta se demuestra cumplida la mitad de sus servicios sociales.
Arresto latente. En caso de que Berlusconi no respete las reglas, los jueces pueden revisar su fallo y condenarlo finalmente a arresto domiciliario. El líder conservador italiano siempre ha defendido su inocencia asegurando que es víctima de un "golpe de Estado" orquestado por jueces de izquierda.
La sentencia fue criticada por uno de los líderes históricos de la izquierda italiana, Massimo DAlema. "Por mucho menos, ciudadanos sin poder terminan en la cárcel", comentó el político. Sin embargo al magnate, acompañado ahora por su fiel novia de 29 años, podrían esperarle sorpresas amargas.
El juicio por el caso Ruby, por el que fue condenado en junio de 2013 en primera instancia a siete años de cárcel por abuso de poder y prostitución de menor que asistía a sus fiestas "bunga bunga", finalizará este año.
En caso de que el empresario sea condenado y sume dos sentencias definitivas a penas de cárcel, la amnistía de tres años de la que se benefició por el caso Mediaset le será retirada. Las dos penas a la cárcel se acumulan automáticamente por lo que no puede optar por realizar labores sociales y estaría obligado a cumplir la pena bajo detención domiciliaria, la humillación que acaba de evitar. Además, este año, otro juicio, por soborno de un senador, le fue abierto en Nápoles (sur).