Horas de alivio se vivieron ayer en las localidades santafesinas afectadas por la crisis hídrica ante la condición estacionaria de los ríos Paraná y Salado y la mejora temporaria del clima. Luego de dos semanas de lluvias y lloviznas se vio el sol en gran parte del territorio santafesino, lo que trajo alivio a las localidades anegadas. Sin embargo, la preocupación no cesó debido a que el pronóstico extendido augura aún precipitaciones para los próximos días. La mejora temporaria permitió optimizar la asistencia a los 1.825 evacuados que se registran en 12 departamentos. “En estos aspectos la situación está contenida”, señaló el ministro de Gobierno, Pablo Farías. “Se continúa con la distribución de alimentos y asistencia permanente a evacuados y en centros de evacuados. Hoy tenemos cerca de 2 mil evacuados en toda la provincia y un número similar de autoevacuados”.
El ministro precisó que “permanecemos en contacto con autoridades nacionales para ponerlas al tanto y demandando distintas cosas. Además —prosiguió— estamos entregando fondos alimentarios de emergencia a través del Ministerio de Desarrollo Social y de la Secretaría de Protección Civil, y destinando recursos a las localidades afectadas para el alquiler de bombas, grupos electrógenos y movimientos de maquinarias”.
Por su parte, Escajadillo confirmó que “están dispuestas todas las áreas operativas de los distintos ministerios y existe un contacto permanente con los mandatarios locales para conocer las necesidades o apuntalar los refuerzos de bombeos”.
“El río Salado estuvo estacionario en estas últimas 48 horas, pero la perspectiva es que está bajando al igual que el Paraná en la cuenca superior, de acuerdo a lo informado por Prefectura. Pero estamos supeditados a los fenómenos meteorológicos porque se pronostican lluvias de variada intensidad”, aclaró Escajadillo. Y añadió que “el Ejército destinó un helicóptero que permite efectuar cargas y un vehículo para acceder a zonas aisladas debido a los caminos intransitables por las lluvias ”.
Los departamentos más afectados, según expresó el funcionario, son Vera y San Cristóbal, además de General Obligado, San Javier, Garay, La Capital, San Jerónimo, Castellanos, Las Colonias, San Justo, Caseros y San Martín.
Consultado sobre la situación de la capital provincial, el secretario de Protección Civil indicó que “tenemos alrededor de 600 evacuados” y que “la crecida del río Salado afecta especialmente a la población que está por fuera del anillo de defensa”.
Las rutas. En el interior santafesino hay numerosas localidades afectadas fundamentalmente por las malas condiciones de transitabilidad de un alto porcentaje de la red de caminos de tierra. En cuanto a la red pavimentada, salvo el corte de la ruta provincial N 6, a la altura del río Salado, ya no se registraron rutas interrumpidas durante la jornada de ayer.
Desde el gobierno de la provincia advirtieron que se deben extremar las medidas de precaución al transitar as rutas y accesos debido a que se encuentran húmedas, resbaladizas y con banquinas inestables. Por otra parte, en algunos sectores del sur de la provincia se registran bancos de niebla que disminuyen la visibilidad.
En la ruta provincial N 6 continúa el corte total de circulación por agua en la calzada en inmediaciones al río Salado en jurisdicción de Esperanza. El segmento vial interrumpido es el comprendido entre las intersecciones con las rutas provinciales 70 y 4. En la ruta nacional N 34 se debe circular con precaución por abundante agua sobre calzada a la altura de San Genaro, en el cruce con ruta 65 en el kilómetro 84,5.
La ruta provincial Nº 1 continúa un corte total para el tránsito pesado a la altura de Colonia Teresa. Los desvíos se implementan hacia la ruta Nº 11 en sentido sur-norte mediante la Nº 39, a la altura de San Javier y en sentido contrario en la intersección de la ruta Nº 1 y la Nº 41.
Para hoy las autoridades recomendaron transitar con prudencia y respetar las indicaciones de la policía por la existencia de bancos de niebla. También continúa el monitoreo sobre la autopista Rosario-Santa Fe a la altura del arroyo Colastiné, donde regularmente se producen cortes por el paso de agua sobre la calzada.
Sobre el asunto Farías, indicó que “el gobernador, Miguel Lifschitz, decidió que destinemos más recursos al área de Vialidad provincial, por lo cual vamos a tener que revisar toda la red de caminos naturales y las distintas situaciones que afectan los caminos”.