Una mirada nostálgica a la creación de un monstruo

Mariana Zalazar (13 años) dice que cuando su maestra de lengua le dio a su curso el libro Frankenstein, su primer impulso no fue precisamente el entusiasmo. Tenían que leer el clásico de Mary Shelley y subrayar la parte que más les gustaba de esa historia que conocía de chica por relatos infantiles.

Pero apenas lo empezó a leer dice que el texto que le dio la seño la atrapó por completo, "porque ademas de causar terror también da nostalgia".

Cuenta entonces que Víctor Frankenstein soñaba de niño con ser un hombre de ciencia. Un deseo que lo llevó a sumergirse en la locura y a crear un monstruo. "Cuando lo hizo se arrepintió, porque el quería crear un ser hermoso. El monstruo al sentirse rechazado empezó a asesinar a toda su familia. Y la nostalgia está al leer cómo él se va quedando solo, sin compañía, por culpa del deseo de crear vida. Sería como estar matando a su propia familia".

Frankenstein es una novela de la inglesa Mary Shelley publicada por primera vez en 1818. Como bien recuerda Mariana, la génesis del libro surgió de una apuesta en una reunión de amigos donde participaba la autora.

Lord Byron, uno de los amigos del matrimonio Shelley, los retó a escribir una historia de terror. Mary tuvo allí la idea de escribir sobre la popular criatura de más de dos metros de altura creada por el científico Víctor Frankenstein a partir de la unión de distintas partes de cadáveres. La historia inspiró dibujos animados, cuentos infantiles y en distintas épocas tuvo varias adaptaciones al cine de terror y de ciencia ficción.

Mariana dice además que le gusta la lectura "porque es como hundirte en un mundo nuevo, escapar de la realidad y tener un espacio para ti misma".

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