El buque Nord Hydra, que permanecía varado en el canal principal del Paraná, a la altura de la ciudad bonaerense de San Pedro zafó de su situación a las 16.10 de ayer luego de recibir la ayuda de dos remolcadores, tras una situación que se prolongó por tres días desde el lunes a las 21.
La varadura del barco,a la que se sumó el conflicto de las plantas aceiteras, generó un verdadero cuello de botella para el tránsito naviero, tanto aguas arriba del Paraná como en la salida hacia el Atlántico por el Río de la Plata ,con más de 50 naves obligadas a largas y costosas esperas en puertos y radas.
Anoche el barco navegaba hacia San Nicolás para fondear en la rada en espera de inspecciones, pero aún la Prefectura no había informado el horario de reapertura del paso por el canal principal ya que todavía no se contaba con los resultados de la batimetría para determinar la nueva profundidad. El sistema de Control de Tráfico y Seguridad de la Prefectura San Pedro regulaba el franqueo de los buques hasta 7,48 metros de calado por el canal secundario.