Buena noticia en el Río de la Plata. Argentina y Uruguay se encaminan a recomponer y retomar la relación política, cortada desde que asomó la controversia por la instalación de una planta procesadora de celulosa, antes Botnia, ahora UPM.
Buena noticia en el Río de la Plata. Argentina y Uruguay se encaminan a recomponer y retomar la relación política, cortada desde que asomó la controversia por la instalación de una planta procesadora de celulosa, antes Botnia, ahora UPM.
El acuerdo que firmaron Cristina y Pepe Mujica, ayer en Olivos, abre una interesante puerta para el entendimiento definitivo y cierra, por otro lado, cualquier tipo de excusas para que la Asamblea de Gualeguaychú vuelva a pararse en la ruta.
Es inútil ahora autoflagelarse con frases o eslóganes que subrayen la gratuidad del problema y del conflicto evitable. Ocurrió y punto. En todo caso, quedará para el futuro la enseñanza de lo que pasó, donde los gritos imperaron sobre las voces y el nacionalismo berreta de una y otra parte desvirtuó posiciones de legítimos intereses.
Más allá de la intransigencia de los ambientalistas, en la que sus acciones siempre orillaron la ilegalidad (algunos de ellos están denunciados por diversos delitos), su empecinamiento en sostener la protesta contra Botnia (ahora UPM) dio sus tremendos frutos: no sólo se vigilará su funcionamiento, sino que el monitoreo ambiental se extenderá a toda la cuenca, a ambas márgenes del río, y abarcará a industrias, establecimientos rurales y ciudades enteras de ambos países.
De cumplirse estrictamente lo resuelto, el río Uruguay se transformará en el curso de agua más vigilado del continente. Habrá que ver si la lógica que mueve al capital se aviene a cumplir lo dispuesto por dos Estados soberanos.
Por lo pronto, tanto Cristina como Mujica se han anotado un poroto en el final de una partida que estaba reñida de un chauvinismo dudoso.
La "buena onda" entre ambos presidentes permitió, por ahora, vislumbrar la solución a un problema y comenzar a trabajar sobre otros tópicos de la relación bilateral entre dos países que comparten algo más que un río.
Por Azul Martínez Lo Re