La escuelita de Serodino. La escuela de la localidad de Serodino se encuentra en un estado lamentable y vergonzoso para una población que actualmente cuenta con más de mil habitantes. El edificio estaba en tal estado de desaseo que la comisión de fomento se vio en la necesidad de darle un blanqueo general; las puertas y ventanas están que si corre un viento fuerte se vienen abajo y ya no tienen ni la sombra de haber sido algún día pintadas, sin contar con que ya no les quedan vidrios sanos y ahora que se aproximan los días fríos será imposible permanecer en esos inmundos salones. Las bancas están tan destruidas que es necesario colocarles puntales y no hay pizarrones ni mapas, libros, tizas, etcétera, etcétera, ya que desde lo primero a lo último falta en esta escuela. Parece increíble que entre los vecinos progresistas y amantes del adelanto de este pueblo no haya nadie todavía tomado la iniciativa de hacer algo práctico en bien de la niñez que acude a esta escuela, pues por esta misma desorganización es que se encuentra vagando por la calle a una infinidad de criaturas en edad escolar y que sus padres se niegan a enviar al colegio porque notan que es tiempo completamente perdido. Ya es hora de que las escuelas rurales se organicen en forma de que puedan ser útiles, y no como sucede en estos momentos en que no sirven ni satisfacen los anhelos de la población. (1906)