Ser el hombre con más poder de los Estados Unidos no es para cualquiera. Así lo entendió Clint Eastwood para decidirse a filmar "J. Edgar", el filme sobre la vida del director de la Oficina Federal de Investigación (FBI), J. Edgar Hoover, que se estrena este jueves en Rosario. Con los protagónicos de Leonardo DiCaprio y Naomi Watts, la producción cuenta con un elenco estelar en el que se destaca la participación de Judi Dench.
"J. Edgar" explora la vida y las relaciones públicas y privadas de un hombre que podía distorsionar la verdad con la misma facilidad con la que la defendió, durante una vida dedicada a su propia idea de la justicia, a menudo dominada por el lado más oscuro del poder.
Fueron casi cinco décadas como director del FBI, un período más que suficiente para demostrar que no habría nada que lo impidiera proteger a su país. Eastwood retrata las virtudes y miserias de la persona que sobrevivió a ocho presidentes y tres guerras.
Mentiras verdaderas. La mirada del director se posó sobre el modo en que supo luchar contra amenazas inminentes y en cómo eludía frecuentemente las reglas con un solo objetivo: mantener a salvo a sus compatriotas, con métodos tan despiadados como heroicos.
Hoover era un hombre que daba mucha importancia a los secretos, especialmente a los de los demás, y que no temía usar esa información para ejercer autoridad sobre las figuras líderes de la nación. Comprendiendo que el conocimiento es poder y que el miedo representa oportunidad, utilizó ambos elementos para ganar una influencia sin precedentes y construirse una reputación de intocable.
DiCaprio se encargó de dar vida a este personaje, que preservaba su vida privada al igual que la pública, y permitió sólo a unos pocos formar parte de su pequeño y custodiado círculo de confianza. Entre ellos, su compañero más cercano, Clyde Tolson (protagonizado por Armie Hammer, de "La red social"), quien también era su amigo más fiel.
Otra persona de su máxima confianza fue su secretaria, Helen Gandy (interpretada por Naomi Watts), quizá la persona que mejor conocía sus planes, y que le fue leal en todo momento. No tanto como su sobreprotectora madre Annie (Judi Dench), quien fue su inspiración y su conciencia, y cuya muerte destrozó a un hijo que siempre buscó su amor y su aprobación.
Cueste lo que cueste. Hoover tenía sólo 29 años cuando asumió el cargo de director general del FBI en 1924. Su consigna fue reformar la organización, cueste lo que cueste, y justamente lo que sufrió fue la enemistad de la larga lista de mandatarios a lo largo de los casi 50 años que duró su gestión.
Muchos de ellos quisieron eliminarlo de tan alto cargo debido a los secretos que conocía Hoover, pero fue una misión imposible.
"La vida de Hoover es un modelo de la transición vivida por la sociedad de mi país a lo largo del mandato de ocho presidentes. Convirtió al FBI en una de las fuerzas de investigación más importantes y eficaces que el mundo haya conocido e hizo mucho para que EEUU dejara de ser aún el reino del salvaje Oeste para convertirse en una nación unificada", dijo DiCaprio en una conferencia ofrecida en Los Angeles, en la premiere de "J. Edgar".
Obsesivo y megalómano. El actor, que fue candidato tres veces al Oscar y nunca obtuvo la estatuilla, destacó otras facetas de su personaje: "Quiso también que cada agente del FBI fuese un caballero, que vistiera bien, que no fumara, que no tuviera comportamientos indignos. Pero también fue un hombre obsesivo y megalómano, que veía amenazas en todas partes, sobre todo por el lado del miedo a los comunistas".
Por último, DiCaprio elogió la capacidad profesional de Eastwood. "Clint tiene un ritmo de trabajo increíblemente rápido. Y es algo deliberado en él. Quiere que trabajes desde el instinto, con la mayor naturalidad, evitando cualquier artificio o sobreactuación. No le gusta perder tiempo con los ensayos. Filma rápido, con poca gente en el set y confía en el instinto del actor. Es uno de los directores más intuitivos con los que trabajé y da gusto verlo confiar tanto en lo que el actor entrega", indicó.
Sexo y rumores
El FBI se mostró un poco molesto por dar a conocer temas de la intimidad sexual de J. Edgar Hoover. Para la realización del filme, Clint Eastwood y Leo DiCaprio se reunieron con el actual director del FBI, Mike Kortan, para obtener datos de la vida de su ex mandamás. Según informó el director Kortan tras dichas reuniones, tanto Eastwood como DiCaprio insistieron en conocer cuáles eran las preferencias sexuales del ex funcionario. “No hay evidencia histórica sobre este tema” dijo Kortan, aunque reconoció que “hubo algunos rumores” sobre la relación que mantenía Hoover con Clyde Tolson, su mejor amigo y compañero laboral. Hoover murió el 2 de mayo de 1972.