El paso del jardín de infantes a la escuela primaria es decisivo. Hay acuerdo
entre los especialistas y pedagogos que es clave para garantizar un buen tránsito por los siete
años de la primaria. Para hacer frente a este desafío las escuelas se dan las más variadas
estrategias, como la diseñada de manera conjunta entre el Jardín de Infantes Nº 64 Daniel Osvaldo
Estuel y la Escuela Nº 6055 Simón de Iriondo" de Rosario.
Aquí la idea fue sencilla y profunda a la vez. Armaron entre una y otra
institución del mismo barrio una muestra de ciencias naturales a la que se sumaron los chicos de 1º
y 2º grados y los 5 del nivel inicial; con la necesaria participación de las maestras y equipos
directivos.
El tema fue elegido entre todos pero también siguiendo las preferencias de los
alumnos. Y qué mejor entonces, según señaló la directora del Jardín 64, Rosana Ferraro, que tener
en cuenta "el interés de los chicos".
En este caso, la elección de los más chiquitos fue contar algo así como la vida
y obra de los dinosaurios. "Un contenido extracurricular que había despertado el interés de alumnos
y alumnas de ambos niveles, antes de que se iniciara la planificación de la misma", recordó la
directora, y agregó: "Fue un claro acierto de las maestras respetarlo".
La exposición de trabajos fue visitada y disfrutada por los propios
protagonistas, los nenes y nenas de las secciones de 4 años y las familias.
Claro que lo mostrado es el resultado de un trabajo más extenso y sistemático
entre los directivos y docentes.
Como advierte la directora Ferraro, son muchas las maneras de llamar el paso de
los chicos del nivel inicial al primario (desde articulación, integración entre niveles a
continuidad de los aprendizajes). Todas son muy distintas "pero con un actor en común: los niños y
las niñas que transitan el sistema educativo".
Diversidad de preguntas. Según explica la directora son también varias las
preguntas que surgen cuando se piensa en lograr un sistema educativo integrado y cita como
ejemplos: ¿qué sabe cada nivel del otro? o bien ¿cómo es necesario enseñarles en cada etapa de su
vida?
Estos y otros interrogantes similares se hicieron las educadoras de las
instituciones de la zona norte de Rosario, cuando en 2006 iniciaron los primeros pasos en un plan
que llaman "Articulación, un camino de ida y vuelta". En rigor se trató de reuniones entre los
equipos directivos y luego con los planteles docentes.
Para un mejor conocimiento mutuo iniciaron un "Plan de integración", con una
jornada pedagógica y recreativa, coordinada por docentes de educación física que ofrecían un plan
de capacitación. "Esto fue placentero y generó disposición para volver a reunirnos", resalta la
directora Ferraro.
Una meta a la que están atentas las docentes del nivel inicial y las de primaria
cuando hablan de articulación es la posibilidad de construir "el nosotros" necesario para
aprender.
Igual, Rosana Ferraro rescata lo que llama una didáctica lúdica y grupal. Y no
duda en recordar que "la infancia es juego".
"El docente debe encontrar las estrategias para entrar en el juego y desde ahí
enseñar; recién más tarde luego de transitar los primeros años del primer ciclo de la primaria, el
chico empezará a diferenciar los tiempos de juego de los de aprendizaje", concluye Rosana
Ferraro.