Por la pelea entre dos perros un taxista quedó internado. La frase suena absurda pero retrata un episodio tan verídico como irracional ocurrido el martes por la noche en Cerrito entre España y Presidente Roca. El taxista herido se llama Roberto Masiello, tiene 60 años, 18 como chofer, y desde hace cuatro días padece una hemiparesia (debilidad o parálisis parcial) en la pierna y brazo derechos debido a los golpes que le propinó el dueño de un perro que creyó que el conductor había pisado al animal.
Testigos del hecho aseguran que el pichicho salió ileso y que la pareja que lo paseaba se dio a la fuga luego de que el conductor se desvaneció. La denuncia se radicó en la comisaría 5ª y Masiello seguía ayer internado en el Sanatorio Mapaci donde se le realizaban estudios. Además, aún no se dio con el hombre que lo agredió, aunque la policía tendría datos de que se trata de un vecino de la zona.
La única que estaba en condiciones de contar ayer la historia era Liliana Domínguez, esposa del peón de taxi que conduce cada día un Ford Fiesta Max en el horario que va de las 17 a las 5. "Mi marido me contó que, alrededor de las 20.30, cuando descendió un pasajero de su auto, vio que dos perros se pelaban y uno de ellos -pequeño, mestizo, de cabeza negra y manchas también negras en el cuerpo- se metió bajo el taxi. La mujer, supuestamente dueña del perro, empezó a gritar que mi marido había pisado al animal, entonces él bajó la ventanilla para explicarle que no había arrancado y que seguramente el animal estaba debajo el auto. Es ahí cuando la pareja de la mujer, un hombre de unos 25 años, sin mediar palabra primero le golpeó el auto a mi esposo y luego le dio un golpe a él. Cuando se sintió desvanecer recibió otro golpe y ahí perdió el conocimiento", relató Domínguez.
Aparentemente, después de este episodio se acercaron algunos taxistas que circulaban casualmente por ahí y gente que pasaba por la zona para socorrer a Masiello. Y en pocos minutos se dieron cuanta que tanto la pareja como el perro en cuestión se habían hecho humo.
Ambulancias. Según la mujer del chofer, tras la golpiza alguien llamó al Sistema Integrado de Emergencia Sanitarias (Sies). "Acudieron, pero le tomaron la presión, le dieron un sublingual y lo dejaron en la vereda. Estoy indignada, a cualquier ladrón que se encuentra por la calle lo llevan al Heca (Hospital de Emergencias Clemente Alvarez), a mi marido, que es un laburante, lo dejaron tirado", se quejó.
Masiello fue transportado a su casa por colegas y finalmente trasladado por una empresa privada de emergencias al sanatorio. Ayer por la tarde, el hombre se encontraba "aturdido y aún sin poder mover normalmente sus miembros derechos" y por esa razón se le estaba realizando una tomografía.
"Por suerte el dueño del taxi nos apoya, pero esto es muy serio. Mi marido esta golpeado y mal de salud por algo absurdo. No me canso de decir que vivimos entre príncipes y mendigos: los primeros son los políticos que no actúan, los otros están entre nosotros mismos, que nos agredimos sin razón", dijo la mujer.
Un robo protagonizado por dos falsos pasajeros
Un taxista denunció ayer que fue blanco de un robo en la zona oeste de Rosario, donde dos delincuentes lo abordaron y, tras amenazarlo con un arma de fuego, se llevaron la recaudación.
Según dio cuenta el chofer, el hecho ocurrió cerca de las 22 del miércoles pasado en Avellaneda y Lima, donde dos hombres que portaban cajas de pizza tomaron el taxi.
Ya dentro del auto, los pasajeros le pidieron que los llevara hasta Riobamba y Lima.
Pero cuando faltaban tres cuadras para llegar a destino uno de los ladrones tomo al chofer por el cuello y le puso un arma de fuego en la nuca.
El otro delincuente aprovechó para quitarle la recaudación, unos 2 mil pesos.
Tras el robo, el taxista alertó al Comando Radioeléctrico, que pese a llegar rápidamente al lugar no pudo dar con los ladrones.