Un robot paseó por Pellegrini y fascinó a grandes y chicos

"Mirá mami, parece Wall-E", dijo Pedro, un nene de 5 años. La cuadra de Pellegrini al 1600 se llenó ayer de curiosos ante el show que el robot producido por la Universidad Abierta Interamericana (UAI) desplegó en plena calle. Se trata en realidad de "Uaibot", una máquina que interactúa con humanos, responde preguntas, maneja un buen vocabulario y fue el atractivo de grandes y chicos. La innovación sirvió para presentar a los rosarinos el sexto Congreso Internacional de Tecnología Informática que tendrá lugar el jueves próximo en la UAI.

Según explicó el decano de la Facultad de Informática de la UAI, Marcelo De Vincenzi, "la idea con Uaibot es haberle implantado inteligencia para simular el pensamiento humano. Esta interacción se graba, se tabula y se generan algoritmos y el robot responde a distintos temas que se le plantean", detalló.

La máquina que ayer deleitó a los niños es la "vedette" del congreso internacional en innovación tecnológica informática, donde participarán especialistas de Argentina, Estados Unidos, China, India y Brasil. Será el próximo jueves en Pellegrini 1618, de 8 a 20.

Uaibot fue construido en el Centro de Investigaciones de la UAI y tiene como fin la domótica, es decir, avances que le mejoran la calidad de vida al hombre.

El robot tiene instalado un programa donde desarrolla algoritmos interpretativos con expresiones idiomáticas. Está equipado con inteligencia artificial para poder dialogar con una persona. Además, tiene visión y responde a estímulos que simula a los humanos.

Copados. En la demostración de ayer, los chicos se coparon con el atractivo. Claro que muchos lo confundieron con el personaje de la película de Pixar, "Wall-E" por su parecido físico. Augusto, de 5 años, se animó a saludarlo y a hablar con él, al igual que Mateo y Pedro, quienes les pidieron a sus papás sacarse una foto. Claro que no fueron los únicos, porque otros más "grandotes" también inmortalizaron el momento con las camaritas de sus celulares.

La tarde calurosa no pasó desapercibida para los transeúntes y automovilistas que circulaban por la zona de Pellegrini y Presidente Roca. El robot saludó a motociclistas, autos y hasta a un interno de la línea 153. "¿Ese colectivo no va a barrio Rucci?. A lo mejor me puedo subir para ir a visitar al padre Ignacio", se escuchó decir a Uaibot con un tono bastante caricaturesco.

Esta máquina cromada, con circuitos, chips y placas de sonido, integra una familia de unos 30 bichos que cuentan con diferentes funcionalidades relacionadas con lo industrial, lo deportivo y la actuación en sitios inhóspitos. Tras 8 años de investigación, los técnicos están desarrollando la interacción hombre-máquina a través de ondas cerebrales.