Un obrero falleció y otro resultó herido en un nuevo accidente en una obra cloacal. El incidente ocurrió ayer a metros de Circunvalación y Eva Perón, en una conexión entre Funes y Rosario licitada por el gobierno nacional. Los trabajadores involucrados habían bajado a la zanja para colocar una bomba de agua, se desmoronó la tierra y los tapó. Uno de ellos falleció a poco de salir y el otro fue derivado al Heca, donde quedó internado fuera de peligro. El gremio de los trabajadores de la construcción (Uocra) cuestionó al municipio por no tener "un mapeo subterráneo actualizado para saber con precisión por dónde pasan los cables y caños".
El accidente ocurrió en la intersección de las calles Venezuela y Chazarreta, detrás de un hipermercado que funciona en una colectora de Circunvalación y Eva Perón. Allí se construye un colector cloacal y estaciones elevadoras que conectan Rosario Oeste con Funes. El año pasado se habían registrado tres fallecimientos en accidentes similares, en obras cloacales de la ciudad y Granadero Baigorria (ver aparte).
La obra, con un presupuesto oficial de 43 millones 584 mil pesos, fue licitada en 2007 por el Ente Nacional de Obras Hídricas de Saneamiento (Enohsa) dependiente del Ministerio de Planificación Federal y se encuentra en su última etapa. La ejecución quedó en manos de una Unión Transitoria de Empresas conformada por firmas locales.
Según relataron testigos del hecho a LaCapital, el suceso se produjo a media tarde cuando Donateo Riquelme, un obrero oriundo de Paraguay de 32 años bajó a la zanja de unos siete metros de profundidad junto a Felipe Bertone, de 42, a colocar una bomba de agua.
El movimiento de suelo generado por la bomba hizo ceder parte de la tierra que estaba afuera, que cayó sobre los dos obreros. De acuerdo al testimonio de otros operarios, tanto Riquelme como Bertone fueron rescatados con vida del pozo, pero a poco de salir Riquelme falleció. Bertone sufrió heridas de consideración, pero anoche se encontraba fuera de peligro según confirmó Sixto Irrazábal, referente local de la Uocra.
En el lugar del incidente, a escasos diez metros de las vías del ferrocarril NCA, los compañeros de Riquelme y Bertone no lograban ocultar su dolor e impotencia. A poco de ocurrido el hecho, ejecutivos de las firmas contratistas y la cúpula del gremio de la construcción también acudieron a la zona oeste para aportar datos a la investigación y solidarizarse con el resto de los operarios.
"Vamos a esperar el resultado de las pericias que encargará la Justicia. Por lo que nos han contado los compañeros, fue un accidente, pero seguramente algún descuido hubo. Las empresas que están a cargo del trabajo son de las más importantes de Rosario y nos aseguran que los elementos de seguridad estaban bien colocados", planteó Irrazábal.
El delegado normalizador del gremio, Carlos Vergara, fue más allá al denunciar que "este tipo de obra cloacal no se puede seguir haciendo sino se cuenta con un mapeo preciso para saber por dónde pasan las cañerías de agua". Para Vergara, "este no es el primer caso de este tipo de accidente, los casos se han repetido, se rompe un caño de agua, se afloja la tierra y se cae arriba de un trabajador, más allá de que los compañeros aseguran que el fallecido tenía colocados todos los elementos de seguridad".
El referente gremial denunció que la ciudad de Rosario "no tiene un mapa subterráneo actualizado por donde pasan los cables y los caños y siempre tenemos accidentes porque dicen una cosa los papeles y después su ubicación es en otro lugar. Hay yerros graves en la descripción del terreno y eso es responsabilidad de la Secretaría de Obras Públicas municipal".