El ex consultor de inteligencia estadounidense Edward Snowden, prófugo de la Justicia de su país, solicitó ayer asilo a Rusia, con el fin de poder viajar después “legalmente” a América latina y agradeció el apoyo de Bolivia, Ecuador, Nicaragua y Venezuela, según un comunicado. “Les pido su ayuda (...) para poder ir de forma segura a América latina y pido asilo político a Rusia esperando que mi viaje sea realizado en la legalidad”, añadió en el comunicado publicado tras un encuentro con organizaciones de derechos humanos en un aeropuerto de Moscú donde está bloqueado desde hace casi tres semanas cuando llegó de Hong Kong, el 23 de junio.
Agradecimiento. Snowden, que ha revelado un gigantesco programa de espionaje de Estados Unidos a ciudadanos y países aliados, aseguró que tiene “la intención de viajar a cada uno de estos países para agradecerles personalmente a su gente y a sus líderes” el apoyo recibido. Y es que los países latinoamericanos mencionados y Rusia han sido los “primeros en levantarse contra las violaciones” de las libertades fundamentales realizadas por la gran potencia, aseguró Snowden, que se dejó fotografiar por primera vez en varias semanas.
Familia y hogar. “Hace poco más de un mes, tenía una familia, un hogar en el paraíso”, escribió Snowden en una carta publicada ayer por WikiLeaks. “También tenía la capacidad, sin ninguna orden judicial, de buscar, apoderarme y leer tus comunicaciones. Las comunicaciones de cualquiera en cualquier momento. Ese es el poder para cambiar el destino de la gente”, agregó.
Tildó de “peligrosa la escalada” emprendida por Estados Unidos, que dio un “paso sin precedentes” al ordenar a los aliados militares el “cierre del espacio aéreo al avión de un presidente latinoamericano”.
Snowden se refería al avión presidencial del mandatario boliviano Evo Morales, que tuvo que aterrizar en Viena ante la negativa inicial de países como España, Francia o Portugal de permitirle sobrevolar sus cielos ante el temor de que el filtrador se encontrara a bordo. “Esta peligrosa escalada representa no sólo una amenaza para la dignidad de América latina, sino para los derechos básicos que comparten cualquier persona, cualquier nación, para vivir sin persecución, y buscar y disfrutar asilo”, dijo.
El prófugo informático de la CIA, que acaba de cumplir 30 años el pasado 21 de junio, anunció que acepta “todas las ofertas de apoyo o asilo político recibidas” y las “que pueda recibir en el futuro” y menciona en particular al presidente venezolano, Nicolás Maduro. Además de Venezuela, Bolivia y Nicaragua le han ofrecido asilo político en Latinoamérica. “Mi estatus de asilado es ahora formal y ningún Estado puede limitar o interferir con este derecho”, dijo, tras acusar directamente a Estados Unidos de violar la legislación de la ONU sobre el derecho al asilo y amenazar con represalias a los países que se han ofrecido a recibirle.
Estados Unidos revocó su pasaporte poco después de sus revelaciones en Hong Kong, el pasado mes de junio, al diario británico The Guardian. La “amenaza ilegal”, que según él ha recibido de Estados Unidos y de algunos países europeos, le impide viajar a América latina y disfrutar “del asilo concedido de acuerdo a los derechos compartidos”.
Mientras recibe estas “garantías de paso” esperará en Rusia. El portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, señaló que Snowden tiene que cesar sus actividades contra Estados Unidos para poder permanecer en Rusia. A cambio, el ex consultor prometió “no perjudicar más a su país”, dijo un participante en una reunión con abogados y ONG, entre ellas Amnistía Internacional, con el prófugo norteamericano en el aeropuerto de Moscú. El presidente ruso, Vladimir Putin, ya había ofrecido asilo el 1º de julio a Snowden, pero bajo la condición de que no siguiera filtrando secretos. Sin embargo, un día después el topo de la CIA rechazó la oferta.
Lazos conflictivos. A las múltiples consecuencias que tiene ya para Estados Unidos la actuación de Snowden, pueden sumarse en breve serios problemas diplomáticos con Rusia y América latina, esta última mencionada por el ex analista de espionaje para establecerse. En el caso de Rusia, al que la Casa Blanca advirtió ayer claramente que no se preste a ser “plataforma de propaganda” de Snowden, se trata de un aliado imprescindible para la seguridad internacional. América latina, por su parte, es la región sobre la que Washington tiene una influencia más directa y una de sus principales áreas de intercambio comercial. Anoche, el presidente Barack Obama se comunicó telefónicamente con Putin para expresarle preocupación por el caso.
Las opciones de Snowden de viajar a Latinoamérica o cualquier otro país son limitadas. No existen vuelos comerciales directos de Moscú a Venezuela, Nicaragua o Bolivia, y cualquier vuelo que atraviese cielo estadounidense, o el de alguno de sus aliados europeos, podría ser muy riesgoso.