"Siempre me echan la culpa a mí. Ya no saben qué inventarme. Me acusan de todo lo que tiene que ver con la cancha y siempre me puse a disposición de la Justicia pero ya estoy cansado de dar explicaciones. El sábado estuve todo el día en el club y me enteré de lo que había pasado por la policía", contó a La Capital Diego Panadero Ochoa, líder de la barra de Newell's, a quien la policía dirigió la mirada por el ataque a seguidores de la familia Camino.
"No tengo nada que ver. Averigüen qué clase de problemas tienen ellos. Parece que todo apunta a ocasionarme inconvenientes a mí cuando yo no me meto en ningún negocio turbio. Hay una campaña para desplazarme o para dejarme preso. Estoy cansado de que me hagan pasar como el ogro de la película".
Tato Camino se desligó
“Yo no iba a ir a la cancha porque tengo un compromiso con la Justicia de presentarme en la comisaría una hora antes de cada partido y así lo hice”, dijo a La Capital Alberto Tato Camino, hermano del ex líder de la barra brava rojinegra y testigo del ataque a balazos del domingo a la tarde contra un grupo de hinchas que se encaminaba hacia el Coloso del Parque. “Más de 500 personas tenían su entrada para ir a la cancha en forma pacífica pero fueron sorprendidos por gente del Panadero Ochoa, un tipo que le hace mucho mal a Newell’s y lleva al paraavalancha a gente de Central que quiere hacer negocios”, sostuvo Tato. En ese sentido, dijo conocer a uno de los dos jóvenes detenidos (identificado como Cuatrerito) porque “es uno de los laderos del Panadero”.
El homicidio se registró en los últimos minutos del martes en Magallanes y avenida Pellegrini. La policía investiga si le dispararon desde una moto.
Por Nicolás Maggi
Por Elbio Evangeliste