Al cierre de esta edición evolucionaban satisfactoriamente los niños heridos en la balacera del viernes al mediodía frente a la Escuela José Ortolani, de Génova al 3200, en pleno barrio Empalme Graneros.
Al cierre de esta edición evolucionaban satisfactoriamente los niños heridos en la balacera del viernes al mediodía frente a la Escuela José Ortolani, de Génova al 3200, en pleno barrio Empalme Graneros.
Así lo confirmó a La Capital la directora del Hospital de Niños Víctor J. Vilela, Stella Binelli. En este efector cursan su recuperación con distinto grado de consideración Lucas Andrada, de 13 años, y un niño de 7 cuyo hermano de 9, también herido, recibió el alta el mismo día del demencial suceso.
Sin dejar la cautela de rigor, la profesional explicó que Lucas, en terapia intensiva, tuvo un buen postoperatorio, está lúcido, compensado y se comunica. El niño afrontó una cirugía reparadora porque la bala le provocó perforaciones múltiples en estómago, colon y duodeno. Mientras que el menor de los niños heridos continuaba en observación precautoria, pero sin ningún riesgo y cerca del alta médica.
Por Nachi Saieg
Por Alicia Salinas
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