Dos muertos en Rosario por gripe A. La noticia, que circulaba anoche en portales
de internet, en la radio y la televisión local puso en alerta hasta a los más confiados. ¿Estamos
frente a un escenario más complicado del que se pensaba? ¿Se trata de una gripe más peligrosa que
otras? ¿Tendrían que haber declarado ya la emergencia sanitaria? ¿Debieron postergarse las
elecciones? La Capital habló con el infectólogo Antonio Montero, investigador del Conicet,
quien manifestó que el número de fallecidos es preocupante en la medida que se sepa cuál es el
número de infectados: "Dos fallecidos es mucho o poco, depende de la cantidad de gente confirmada
con el virus, pero desgraciadamente no sabemos cuál es el escenario en la Argentina. Se nos acabó
la suerte, ahora estamos librados a la buena de Dios", ironizó.
Montero no dudó en calificar de improvisados a quienes
dirigen la salud en el país. "No tuvimos una campaña de información coherente", apuntó. Y fue más
allá con los ejemplos: "Acá pasó algo muy grave, en los hospitales de la provincia de Santa Fe ni
siquiera les especificaron a los médicos cómo debían acceder a la droga osetalmivir, el antiviral
que se usa en casos de gripe A; estaban todos desorientados".
Montero no es alarmista respecto de las consecuencias que
puede tener en el organismo humano la gripe porcina. "Es una gripe, ni más ni menos. Lo que pasa es
que la gente se dio cuenta ahora de que la gripe es una enfermedad grave que puede matar, pero no
ésta, sino cualquier gripe".
El especialista, que definió la realidad de estos días como
"el fin de la inocencia", manifestó que la "gripe común" se lleva la vida de 5 mil personas por año
en la Argentina, algo que la mayoría de la gente desconoce. "Lo que no sabemos es si esta va a
matar a 50, a 100 ó a 10 mil", relató el profesional.
Cerrar o no cerrar.
La responsabilidad es ante todo del
Estado, señaló, pero también le compete a la gente y hay "mucha inconsciencia". La medida de cerrar
los colegios en los que se fueron detectando casos positivos de gripe A también fue cuestionada por
el investigador: "O cierran todos los de la ciudad o ninguno, a medias no sirve. Por ejemplo, ¿para
qué cierran las secundarias si los chicos después se juntan en el boliche?".
En relación al acto eleccionario de
ayer y la preocupación que generó esto en muchas personas, dijo: "Y sí, las aglomeraciones son
peligrosas y fomentan la transmisión de cualquier virus".
El investigador del Conicet se mostró
especialmente molesto por la falta de prevención, control y ejecutividad que han demostrado, a su
entender, las autoridades a cargo del Ministerio de Salud de la Nación. "Cuando sucedió lo de la
gripe aviar hace 5 años, se redactó un plan de contingencia que ahora no se está cumpliendo",
mencionó.
Montero dijo que en el país debería
crearse de inmediato una agencia nacional de control de enfermedades como la que existe en Atlanta,
Estados Unidos. "Es como un Senasa, pero para las personas", explicó y agregó: "Así como estamos,
nos van a complicar la vida la gripe A, el dengue, la fiebre amarilla y hasta la rabia".
El escudamiento, esto es cerrar todos los lugares donde se aglomere
gente (cines, estadios, boliches, reuniones sociales), sirve si se conoce a ciencia cierta qué está
pasando, algo que Montero asegura que nadie conoce en forma fehaciente. "De todos modos, hay
medidas de prevención que son claras y que la gente debería respetar: tomar una distancia prudente
entre unos y otros, no ir al trabajo ni subirse a un colectivo si se está con síntomas de fiebre o
resfrío, si cierran las escuelas no llevar a los chicos al shopping o a los cumpleaños, no asistir
a lugares como los boliches, es de sentido común".