Tras la estrepitosa caída ante Racing, los jugadores de Boca Juniors y su entrenador, Carlos Ischia, decidieron no realizar declaraciones a la prensa apostada a la salida del vestuario visitante.
Tras la estrepitosa caída ante Racing, los jugadores de Boca Juniors y su entrenador, Carlos Ischia, decidieron no realizar declaraciones a la prensa apostada a la salida del vestuario visitante.
Según confirmó el departamento de prensa xeneize, el DT ya había comunicado antes del encuentro su intención de no dialogar con los medios.
El primero en abandonar los camarines visitantes fue el presidente de Boca, Jorge Ameal, quien se alejó en un auto particular. Casi diez minutos después comenzaron a ascender al micro del equipo los primeros jugadores: Riquelme, Abbondanzieri y Mouche, los tres sin hablar con los periodistas.
Tras un breve interín pasaron en fila india el grueso de los integrantes del plantel xeneize, también sin emitir palabra alguna. Los últimos en retirarse fueron el propio Ischia, su ayudante Angel Celoria, el manager Carlos Bianchi y el dirigente José Beraldi.
Lorenzo Altamirano, de 28 años, era malabarista y músico. Los homicidas lo llevaron en un auto hasta la puerta del estadio de Newell's, donde lo mataron con tres balazos y dejaron en sus prendas un mensaje dirigido a personas relacionadas a la barra brava.
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