Saquearon una casa de deportes de zona norte

La alarma no paraba de sonar y los vecinos ya habían avisado a la policía y al encargado del local. Pero eso no impidió que cinco o seis hombres saquearan una casa de venta de artículos deportivos de zona norte tras romper dos candados, una persiana de chapa y una puerta de vidrio. Los maleantes cargaron la mercadería en dos autos y escaparon, también con algo de dinero, antes de que llegaran los patrulleros. Lo que más perturbaba ayer a los dueños del comercio es que el golpe, ocurrido durante la madrugada, fue casi calcado a otro perpetrado 20 días antes en el mismo local.

El hecho ocurrió alrededor de las 4 de la mañana en Centro Deportes, una tienda que funciona desde hace 20 años en Baigorria al 2300. "Me llamó un vecino porque estaba sonando la alarma. Si bien es monitoreada, no me llamaron desde la central porque los ladrones cortaron los cables del teléfono", relató Damián Castillo, encargado del local y yerno de uno de los dueños.

"El vecino -añadió Castillo- pudo ver que cinco o seis personas cargaban las cosas en un Fiat Uno y un Ford Ka y llamó al Comando Radioeléctrico. Cuando yo llegué sólo había tres patrulleros esperándome para poder entrar al negocio. Todo debe haber sido muy rápido", explicó.

El encargado sostuvo que los ladrones huyeron con bastante indumentaria que estaba colgada en los percheros y exhibidores: ropa de primeras marcas, camperas, conjuntos deportivos y algunos pares de zapatillas. "Se llevaron todo lo que estaba a mano porque, evidentemente, con la alarma sonando no disponían de mucho tiempo. También robaron entre 2.000 y 2.500 pesos que habían quedado en caja", comentó Castillo, mientras unas veinte personas trabajaban dentro del local arreglando la alarma, la persiana, los vidrios y la cerradura que los maleantes rompieron para entrar.

Calco. "Todavía no puedo estimar el monto de lo que se llevaron", indicó el joven que, más allá del golpe sufrido ayer, se mostraba más preocupado aún por el hecho de que el robo parecía calcado a otro sufrido 20 días atrás.

"Fue exactamente igual, salvo que la otra vez no cortaron los cables del monitoreo de la alarma así que me avisaron directamente desde la central. Y aunque también llegamos tarde, esa vez se llevaron la mitad de mercadería que ayer", recordó Damián, convencido de que "los ladrones deben haber sido los mismos" y pensando en instalar un par de cámaras de video y reforzar la seguridad del local.