Una lluvia convectiva que descargó 135 milímetros en el lapso de cuatro horas en la mañana de ayer ocasionó la evacuación de diez familias, dejó sin transporte público, anegó calles e inundó numerosas viviendas en distintas zonas del casco ubano de la capital provincial. El fenómeno meteorológico, que preanunciaron negros nubarrones, literalmente transformó el incipiente día en noche entre las siete y las once de la mañana y obligó a miles de santafesinos a postergar sus obligaciones de rutina hasta el mediodía de ayer.
A media mañana la peatonal San Martín lucía despoblada y las principales arterias se tornaron intransitables lo que obligó a las empresas de colectivos, taxis y remises a cesar casi por completo el servicio de transporte urbano de pasajeros. Las autoridades municipales aconsejaron desde las emisoras radiales, que cubrieron minuto a minuto la emergencia recogiendo llamados de vecinos a cuyas viviendas ingresaba el agua, que la gente no saliera a la calle ni los autos transitaran salvo casos de extrema necesidad para paliar los efectos del temporal.
La lluvia generó inconvenientes en el microcentro y predominantemente en los barrios de las zonas sur y oeste donde el agua cubrió las calles de vereda a vereda, situación que derivó en la evacuación de diez familias de los barrios Santa Rosa y Santa Fe, que las autoridades municipales evacuaron en diversos centros de asistencia y a la suspensión transitoria del transporte público de pasajeros. El sistema de desagüe colapsó en varios puntos de la ciudad por la abundante agua caída en pocas horas, por lo cual las empresas de colectivos indicaron a los choferes que retornen a las paradas.
Según los datos registrados por el área de Gestión de Riesgos de la Municipalidad, el total de agua caída en el Centro Comunitario de avenida Facundo Zuviría, ascendía a 126 mm, en el Hospital de Niños 112 y en Alto Verde, 138,5 mm. La lluvia fue cediendo en intensidad a partir de las 11, con lo cual los sistemas de drenaje comenzaron a funcionar y la situación se alivió paulatinamente hasta normalizarse en horas del mediodía.
Rayo. La intensa tormenta que se abatió ayer sobre la capital santafesina también afectó a varias localidades del área de influencia, entre ellas Coronda.
En esa ciudad del departamento San Jerónimo, un agente del Servicio Penitenciario debió ser hospitalizado afectado por la caída de un rayo en una garita de la Unidad Carcelaría Modelo. La víctima, que fue asistido por un shock provocado por el aturdimiento que le causó la caída del rayo mientras se encontraba de guardia, fue identificado como Alcides Bórtoli. El guardia fue sometido a distintos chequeos que arrojaron resultados negativos y quedó internado en observación en buen estado de salud para recuperarse de la conmoción.
En Paraná. El fuerte aguacero que se desató también sobre Paraná generó gran cantidad de anegamientos en diversos puntos de la capital entrerriana, por lo que Protección Civil municipal asistió a decenas de familias, mientras los pedidos de ayuda se reiteraban. Se calcula que en pocas horas cayeron más de 100 milímetros, y el agua avanzó dentro de los domicilios de los barrios más afectados: Los Arenales, la Toma Nueva, Jorge Newbery y la zona céntrica.
"Recibimos en la mañana más de 60 llamados por casas anegadas por lo que mandamos los vehículos para trabajar de inmediato con las bombas. Tenemos tres y hemos pedido colaboración a Obras Sanitarias y Bomberos. Lo primordial es, en principio, sacar el agua de los domicilios", dijo ayer a este diario el director de Protección Civil, Darío Aldana.