El partido transcurrió, el resultado quedó y la bronca decanta para convertirse en análisis. Miguel Angel Russo ratifica que su equipo será un rival muy duro para todos. Que el espíritu combativo no disminuirá y que la derrota ante River no modificará la convicción. "Lo dijimos antes y lo reiteramos ahora, sabemos lo que queremos y el camino que transitamos", expresa con firmeza en la apertura del diálogo con Ovación en el mediodía. El técnico de Central insiste en afirmar que "hay que seguir trabajando para mejorar, esta es la única fórmula, el trabajo, y con ello vamos a consolidar lo que debemos consolidar y corregir lo que se deba corregir".
—Las derrotas duelen, a nadie le gusta perder, y a mí menos, pero las formas de las derrotas son las que pueden preocupar o no. En este caso me ocupa, porque Central será un rival muy complicado para todos, fijate que prácticamente no nos llegaron, presionamos en todo momento y dispusimos de situaciones para desnivelar. Esa es nuestra forma de jugar, achicando los espacios, buscando generar el error del otro cuando tiene la pelota y tratar de administrarla bien cuando la tenemos para vulnerar. Todos nos fuimos con la sensación de que el resultado no reflejó lo que ocurrió en el campo. Pero no me quejo. Hay que seguir trabajando para mejorar, porque siempre hay cosas por corregir.
—Mirá, Central corre y pone lo que hay que poner, busca jugar, y en este contexto nos falta hacer la pausa del medio hacia adelante para elaborar. Consiguiendo eso vamos a alcanzar el equilibrio que necesitamos.
—¿Contás con los jugadores o él jugador para tener esa pausa que mencionás?
—Por supuesto que sí, pero esto recién empieza y hay un recorrido que todos necesitamos para coordinar con mayor certeza y ensamblar mejor las partes. Hay jugadores que están creciendo y requieren de confianza y algo de paciencia. Y estamos convencidos de que vamos por el camino correcto.
—¿Por qué cuando debió salir Delgado ingresó Ballini?
—Porque en un plantel no puede haber un jugador que sólo cumpla una función, porque necesitás jugadores polifuncionales, y Ballini es polifuncional. Además de jugar en la zona de volantes puede ocupar cualquier lugar en el fondo. Y sabíamos que ante cualquier emergencia podía ingresar, e incluso hablamos de esa posibilidad. Es más, él mismo se los contó a los periodistas cuando salió del vestuario tras el partido. Obvio que considerábamos muy difícil que Delgado debiera salir porque es muy fuerte, pero bueno, lamentablemente en esa ocasión debió hacerlo por una lesión. Pero Ballini hizo bien su trabajo de defender y cubrir el sector.
—¿Hay algo que te fastidió además de perder?
—No me gusta que nos hagan un gol de pelota parada, más cuando defensivamente no pasamos sobresaltos. Pero bueno, insisto con lo mismo, sabemos qué queremos y cómo conseguirlo.