Tom Cruise vuelve a calzarse el traje que mejor le sienta: el de la acción. Así, vuelve a las pantallas en el rol del agente Ethan Hunt en "Misión imposible IV. Protocolo fantasma" que se estrena hoy en Rosario.
Tom Cruise vuelve a calzarse el traje que mejor le sienta: el de la acción. Así, vuelve a las pantallas en el rol del agente Ethan Hunt en "Misión imposible IV. Protocolo fantasma" que se estrena hoy en Rosario.
La película, producida por Cruise, comienza con una explosión en el Kremlin, de la cual es acusado Hunt. Así inicia el recorrido de una película que fue rodada durante más de cinco meses en locaciones que fueron desde Los Angeles a Moscú, Praga, Dubai, Mumbai y Vancouver y cuyo protagonista tendrá en sus manos la obligación de salvar al mundo de un ataque nuclear y limpiar su reputación.
"Ethan sólo ha confiado en sí mismo en las tres películas anteriores pero en esta película tiene que confiar en otros" aseguró Cruise. "En su organización lo traicionaron muchas veces, pero ahora no tiene otra alternativa que confiar en tres personas más a las que no conoce bien".
Entre ellas se cuenta por primera vez una agente femenina. Se trata de Jane Carter, a cargo de Paula Patton. "Una tipa de pocas pulgas", la definió el director Brad Bird. A pesar de su experiencia como investigadora, la motiva algo más que su deseo de terminar la misión: la venganza. "Jane es tan implacable como los otros agentes y quizás más que ellos," observó Patton. "Es alguien a quien hay que temer y respetar".
Fascinación. Sorteando obstáculos de todo tipo y hasta escalando las fachadas del edificio más alto del mundo, el Burj Khalifa, Cruise se dio el gusto de volver a la acción tal como lo viene haciendo en "Sentencia previa", "Colateral", "Operación Valquiria" y por supuesto las tres películas previas de "Misión imposible".
"Me fascina contar historias, las películas de acción y la tensión. Quiero entretener al público y crear nuevas escenas, secuencias diferentes. El público tiene que divertirse, sentarse al borde de sus asientos por la tensión", dijo el actor.
Además explicó: "No puedo vivir sin riesgo en la vida. El sentimiento de generar adrenalina es fabuloso y siempre que surge la oportunidad la aprovecho como una exploración personal", aseguró.
Herencia. Según explicó esa afición le viene desde la infancia: "Cuando tenía cuatro años tiraba mis muñecos desde el techo de mi casa. Pero cuando en la televisión vi cómo se tiraban los soldados en paracaídas. Así que fabriqué uno con sabanas y me tiré desde el techo. Obviamente quedé inconsciente en mitad de la acera", contó entre risas sobre aquel primer acercamiento a la acción.
Una prueba de esa atracción fue rodar algunas de las escenas en el Burj Khalifa que con 828 metros de altura batió todos los récords. Sin embargo aseguró que no le teme a los riesgos, aunque los busca. Así lo manifestó cuando tuvo que saltar con una soga de la punta del Burj Khalifa. "El primer momento en el Burj Khalifa, cuando vi la cuerda, pensé que era el momento de la verdad. Una cosa es hablar de ello, estudiar todas la posibilidades y otra muy diferente intentarlo. Recuerdo que no conseguí meterme en la habitación a la primera y me di un buen golpe contra la pared del edificio", bromeó sobre esa escena que tardó ocho días en rodarse y que fue planeada segundo a segundo.
Héroe humanizado. La película, según se adelanta, tiene algunos elementos singulares que hacen de Hunt un personaje no del todo heroico. Para empezar los guionistas le sacaron a los agentes la posibilidad de apoyarse permanentemente en la tecnología e información con la que siempre contaron al punto que, como en la vida, parte de su instrumental no siempre funciona correctamente.
"Es la idea que en la vida no todo sale exactamente como lo planeamos y que eso también le pasara a los agentes era verosímil. Tampoco tienen la agencia respaldándolos y no pueden confiar en sus armas, artefactos y trucos como antes. Tienen que confiar en sí mismos, en su intuición y su entrenamiento. Para complicar las cosas, tienen que trabajar con Ethan, un agente que estuvo en prisión, alguien que no necesariamente tiene varias medallas en el pecho", adelantó uno de los guionistas.
Cruise es uno de los actores más famosos de Hollywood, que como en este caso, tomó a su cargo la producción de sus propias películas. "Me tomo las cosas con calma", aseguró.
Fiel a su estilo dinámico, añadió: "Es una aventura superar las dificultades que genera la fama. No puedo quejarme, he tenido mucha suerte en mi carrera, tengo unos hijos maravillosos, y disfruto de todo lo que hago, ya sea como padre, marido, productor o actor. En todo lo que hago me entrego con la misma pasión, pero aunque trabaje muchas horas trato de organizar mis horarios y mi tiempo en función de mis hijos y las necesidades de mi familia", afirmó.
En clave de animación
Para dirigir el filme, Tom Cruise se decidió por Brad Bird, quien antes se destacó como el responsable de dos exitosas películas animadas, “Los increíbles” y “Ratatuoille”, ganadoras de sendos Oscar en su rubro. También participó “Los Simpsons” y “Los reyes de la colina”. Escribió, dirigió y co-produjo el episodio “Family Dog” de la serie de televisión de Steven Spielberg “Historias Asombrosas” y co-escribió el libreto para la película “Milagro en la Calle 8” protagonizada por Hume Cronyn y Jessica Tandy.