La ciudad de Rafaela cuenta desde ahora con un juzgado federal de primera instancia, el primero en esta localidad, un tribunal largamente esperado en una zona estratégica para el combate del narcotráfico, por cuanto la ruta 34 es una vía crucial en al transporte de sustancias ilegales. El gobernador Antonio Bonfatti, el presidente de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, Ricardo Lorenzetti, y el intendente de Rafaela, Luis Castellano, fueron los encargados de inaugurar ayer este nuevo espacio, que será de competencia en materia criminal y correccional, civil, comercial, laboral, tributario, de la seguridad social y contencioso administrativo.
En la oportunidad, el gobernador indicó que el lugar se transformará en una herramienta clave en el marco de la lucha contra el narcotráfico, y lo catalogó como “un hito para la provincia de Santa Fe. Como Nación, provincia y municipio tenemos problemas, pero coincidimos que nuestra mayor preocupación es la convulsión que vive la sociedad argentina en su conjunto, donde banalizamos problemas cotidianos”, señaló el mandatario.
El gobernador pidió pensar en “los niños y los jóvenes”, además de “debatir, generar espacios de diálogo, fortalecer las instituciones, y la unidad para combatir el flagelo universal de las drogas, que es un problema de todos. Esto nos ayuda muchísimo porque se fortalece la Justicia federal”, señaló, y convocó a los presentes a “seguir con el diálogo y trabajar en forma conjunta”.
Presencia del Estado. Por su parte el juez Ricardo Lorenzetti dijo que la creación del juzgado “fue un largo proceso, demasiado largo, pero estos esfuerzos son muy importantes, porque sólo se logra lo posible si peleamos por lo que parece imposible. Este juzgado es un paso muy grande en lo que denominamos el acceso a la Justicia, porque la hacemos más cercana a la gente”, dijo el presidente de la Corte, y pidió “pensar en los problemas de políticas de Estado que tiene el país, como el narcotráfico”.
A su juicio, para combatir este flagelo “necesitamos una fuerte presencia del Estado, como lo estamos haciendo con el gobernador de la provincia, la Nación y el municipio”. Lorenzetti dijo también que “tenemos mucho por hacer, y por eso debemos involucrarnos todos, dialogar y trabajar juntos”.
Del acto, desarrollado en la esquina de 25 de Mayo y Moreno, donde se emplaza el juzgado, participaron los ministros de Justicia y Derechos Humanos, Juan Lewis; el senador nacional Rubén Giustiniani y los diputados nacionales Omar Perotti y Oscar Martínez; el juez responsable del juzgado, Miguel Abásolo; el titular del Consejo de la Magistratura, Alejandro Sánchez Freytes, y el presidente de la Corte Suprema provincial, Rafael Gutiérrez.
En tanto, el intendente rafaelino Luis Castellano consideró que el espacio “ayudará a la ciudad, y el éxito del juzgado será el de todos los rafaelinos. Hay que trabajar, porque la realidad actual no es a la que estábamos acostumbrados, con venta y consumo de drogas”.
A su turno, Abásolo, quien estará justamente al frente de la dependencia, señaló que el objetivo del lugar es “brindar un verdadero servicio de justicia a la ciudad, para acercarla a la gente”, e indicó que el logro es “el resultado de esfuerzos mancomunados, y un hito en la historia de la ciudad”.
Las instalaciones. El juzgado funcionará en un sector del histórico edificio del Correo Argentino, a tan sólo una cuadra de la Municipalidad. La Corte Suprema invirtió fondos para refuncionalizar los 1.200 metros cuadrados que fueron cedidos en comodato por el Correo al Poder Judicial.
Desde el Consejo de la Magistratura se señalo que el juzgado cuenta con locales aptos, tres secretarías con un acceso principal por 25 de Mayo y un segundo acceso secundario por calle Moreno que permite ingresar directamente a los despachos de juez y secretarios. A esto se suma la Sala de Audiencias, todos ellos en primer piso, como también los locales ubicados en el subsuelo para alojamiento transitorio de detenidos, con guardia policial y archivo de expedientes.
