El conductor del programa "La Hojilla", Mario Silva, del canal estatal venezolano, anunció ayer que se retirará de la conducción del mismo por unos días, aunque no explicó hasta cuándo, por motivos de salud. El anuncio cae un día después de que la oposición venezolana hiciera pública una grabación donde se escucha a Silva en conversación con un alto oficial de inteligencia cubano que cumple funciones en Venezuela. En ese audio se puede escuchar a Silva denunciando al presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, y refiriéndose al canal de televisión estatal venezolano como víctima de un vaciamiento.
A través de un comunicado, Silva declaró que rechazaba categóricamente todo el montaje hecho por la ultraderecha a través del diputado Ismael García, calificando de absolutamente falsa la grabación divulgada por la "ultra derecha". Sin embargo, aclaró que no le debe disculpas a nadie, que no le ha hecho daño a nadie y que no ha hecho nada contrarrevolucionario. Agregó que si hubiera hecho algo de ese tenor, si estuviera haciéndole daño a la revolución, sería el primero en apartarse. A su vez dijo estar dispuesto a "inmolarse por la revolución bolivariana con mucho gusto y plena convicción". "Han ejecutado un plan casi perfecto para enterrar a La Hojilla y a mi persona. He decidido ponerme a derecho. Si tengo que ser juzgado, me pongo a la orden. Chávez me enseño a no ser cobarde. Pongo a disposición La Hojilla, que no es mi programa; La Hojilla siempre fue un programa de nuestro comandante supremo, y por su orden del presidente Nicolás Maduro".
"Guerra psicológica". Al respecto Maduro, según informó Telesur, convocó al pueblo a salir al frente a los ataques opositores con actividades en la calle para "demostrar la cohesión y la unidad revolucionaria que se ha mantenido en el Gobierno nacional". Esto viene a cuento de que las escuchas en cuestión revelan la fractura que existe hacia adentro del chavismo entre los seguidores de Maduro y los de Diosdado Cabello. "Tenemos que salir al frente con el pueblo en la calle, conformando una cohesión revolucionaria que reivindique la unión del país", reiteró. "La derecha está utilizando a los desplazados, a los desconfiados para generar una guerra psicológica que busca generar una separación en la Revolución". Maduro calificó el accionar de la oposición como "guerra psicológica" y declaró que "la derecha no tiene moral para hablarle al pueblo". Por último, tildó a los opositores de conspiradores.
Por su parte, el gobernador del Estado de Lara, el caprilista Henri Falcón, se pronunció al respecto diciendo que estas escuchas vienen a ratificar las denuncias que ellos habían hecho cuatro años atrás cuando a través de una carta acusaron de corrupción al gobierno de Chávez. Agregó que debe exigirse que se investigue a fondo lo que surge de los dichos ya que los hechos relatados son de mucha gravedad e involucran a personas muy encumbradas dentro del gobierno venezolano.
En tanto, el ex candidato a presidente y actual gobernador de Miranda, Henrique Capriles afirmó que lo que está viviendo Venezuela ya no es una crisis económica únicamente sino que es también una crisis moral y que esto último queda evidenciado en las escuchas, porque "ese audio los muestra repartiéndose un botín". Ante esto, prosiguió, "cómo no vamos a generar un cambio en el país. Aquí el que termina preso es el pobre, pero a ese grupito que está saqueando al país no les pasa nada y eso no va a cambiar solo, eso va a cambiar si ustedes quieren que cambie", finalizó.
El Congreso reanuda sesiones
La Asamblea Nacional reanudó ayer sus sesiones luego de tres semanas de paralización en un intento por superar la difícil situación que se generó tras una pelea en el recinto que dejó varios congresistas heridos. Cabello no aclaró si permitirá a los diputados opositores el uso de la palabra que les quitó junto con la presidencia de las comisiones, desencadenando la pelea que terminó con los incidentes del 30 de abril, con varios diputados heridos.